LAG
BAOMER
Una
Fiesta Atípica
Por: Moshé
Korin
"Lag
Baómer" es una festividad atípica dentro
de las que marca el calendario hebreo. A diferencia de las otras,
no se menciona en la Biblia y sus orígenes no aparecen
muy claros.
La
palabra hebrea "ómer" significa
"pequeño manojo de espigas". Es lo que
cada Hijo de Israel debía ofrendar en el Templo de Jerusalem
el primer día de "Pésaj" (Levítico
XXIII, 10-11). Luego, a partir del segundo día de "Pésaj"
(Levítico XXIII, 15-16), se contaban 7 semanas completas.
Era el llamado "Cómputo del Ómer"
("Sefirat Haómer"). El día 50º
se celebraba la fiesta de "Shavuot" ("Jag
Hashavuot" = Fiesta de las Semanas), también llamada
"Jag Habikurim" (Fiesta de las Primicias),
cuando se entregaban en el Templo nuevas ofrendas de los primeros
frutos ("bikurim"). |
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"Lag
Baómer" significa "el día 33º en el Cómputo
del Ómer", ya que según el valor numérico
de las letras hebreas, "L" = 30 y "G" =3; por lo tanto,
"lag" = 33. La fecha que le corresponde es la del 18 del mes
de Iiar.
Desde
tiempos muy remotos, rigen para el judío observante, en el Período
del "Omer", costumbres propias de los días de
duelo, sin que exista para ello una explicación precisa.
Sin
embargo, al llegar al día 33º del Cómputo, el duelo se interrumpe:
nuevamente se realizan ceremonias de casamiento y sus fiestas respectivas;
se encienden fogatas en todo el País de Israel, y en Meirón (Galilea, cerca de Safed), según viejas tradiciones, se lleva a
cabo un festejo junto a la tumba de Rabi Shimón Bar Iojái.
En
distintos lugares de la Diáspora, se acostumbró por generaciones
salir ese día con los alumnos al campo y a los bosques y pasarlo
en contacto con la Naturaleza. En la ocasión, se llevaban arcos
y flechas y se practicaban distintos juegos.
¿Cuándo
adquirió "Lag Baómer" su carácter
festivo y por qué causa?.
Una
leyenda talmúdica refiere que el gran Rabí Akiva llegó a tener "doce mil pares de alumnos", y que
todos murieron en un mismo lapso ... entre "Pesaj" y
"Shavuot". Los Gaonitas (jefes de las Academias
de Babilonia, siglos VI al XI), mencionan dicha fuente y afirman que,
a partir de entonces, se determinó que no se celebraran casamientos
durante ese período.
¿"En
qué se diferenció, entonces, "Lag Baómer"
de los demás días del Cómputo? Un grande de Israel
lo explica así: "Afirma una tradición de los Gaonitas
Z"L, que en el día de "Lag Baómer" cesó
la mortandad, y que por eso también debían dejar de atormentarse".
Cabe
inferir de sus palabras que en esa fecha sucedió algo fuera de
lo común, razón por la cual se determinó que el día
fuera festivo; y así se lo consideró desde tiempos muy remotos.
Dijo Rabí Shimón Bar Iojái:
"Tres
dádivas le otorgó el Santo Bendito Sea al Pueblo de Israel,
mas ninguna de las tres le llegó exenta de dolores. Ellas son:
la Torá, la Tierra de Israel y el Mundo Venidero".
La Rebelión de Bar Cojva.
La
opresión creciente, los pesados impuestos y la expulsión
de los campesinos de sus tierras, empobrecieron al pueblo de Judea. Los
edictos del emperador Adriano, que les prohibían cumplir
con los preceptos de su religión, a fin de imponerles la cultura
romana, sublevaron a los hijos del país. Muchos de ellos no se
resignaron a ver a Jerusalem transformada en ciudad pagana, bajo
su nuevo nombre de Elia Capitolina. Y la pretensión de Adriano de construir en el Monte del Templo un santuario dedicado a Júpiter,
colmó todas las medidas. Entonces se fueron apalabrando para la
rebelión.
La
misma estalló en el 132 y duró 3 años,
hasta el 135. Su jefe era Shimón Bar Coziba (así
llamado por ser Coziba su ciudad natal). Los Sabios de Israel apoyaron a los rebeldes, y entre ellos el más ilustre, Rabí
Akiva. Se cuenta que fue él quien cambió el nombre de Bar Coziba por el de Bar Cojva (Hijo de la Estrella),
inspirándose en el versículo 17 de Números XXIV:
"Daraj Cojav MiIaakov" (= "De Iaakov ha salido
una estrella"). Rabí Akiva creía que se
aproximaba la hora de la Redención. En el Talmud se refiere que
cuando veía a Bar Cojva, exclamaba: "¡Éste
es el Rey, el Mesías!".
Los
numerosos discípulos de Rabí Akiva se plegaron a
la insurrección y tomaron parte activa en la lucha. De acuerdo
con una tradición popular, los días posteriores a la festividad
de "Pésaj" fueron muy duros para los combatientes.
Muchos fueron hechos prisioneros o cayeron en los campos de batalla. A
ellos alude el Talmud cuando habla de "12 mil pares de
alumnos de Rabí Akiva que murieron en ese tiempo". Y tal vez por eso pasó a ser un período de duelo.
Según la misma tradición, el día 33º en el
Cómputo del "Ómer" se produjo un giro inesperado
a favor de los rebeldes. Es posible que los hombres de Bar Cojva hayan logrado ese día reconquistar Jerusalem; y de ahí
la explosión de alegría que acompaña a esa fecha.
Rabí
Shimón Bar Iojái.
Rabí
Shimón Bar Iojái, uno de los discípulos más
brillantes de Rabí Akiva, se encontraba también entre
los inspiradores de la rebelión. Debió huir de los romanos,
que lo perseguían para quitarle la vida, y en torno de su figura
se tejieron muchas leyendas. Nuevamente es en el Talmud donde las hallamos
registradas. Se dice que él y su hijo vivieron 13 años ocultos
en una caverna, hasta que pasó el peligro, y que Rabí
Shimón Bar Iojái murió un día de "Lag
Baómer".
Siguiendo
una antigua costumbre, se suele honrar la memoria de un grande de Israel
yendo a rezar sobre su tumba en los aniversarios de su muerte. De ahí
la tradición de reunirse en "Lag Baómer"
junto a la tumba de Rabí Shimón Bar Iojái,
en Meirón. Para algunos Cabalistas, sería ese gran
sabio el autor del famoso "Libro del Zóhar", que
contiene los fundamentos de la Cábala o "Jojmat Hanistar"
(El Saber Oculto).
Por
eso, los adeptos a la Cábala y otros judíos devotos realizan
en Meirón, en "Lag Baómer", la llamada
"Hilulá" (Celebración). Encienden fogatas
porque, según una leyenda, al morir Rabí Shimón
Bar Iojái su casa se llenó de luz y de un fuego que
duró todo ese día. A lo largo de la noche se entonan canciones
y plegarias compuestas en honor del gran tanaíta.
En
algunas comunidades sefaradíes, las costumbres de duelo propias
de los días que transcurren entre "Pésaj"
y "Shavuot", suelen hacerse menos severas después
de "Lag Baómer".
Salidas
al campo.
Arcos
y flechas son característicos de "Lag Baómer"
en el particular estilo de vida que se constituyó en la Diáspora
del Este Europeo y que se reflejó en su literatura.
Ese
día, los "melámdim" (maestros elementales)
salían de excursión con sus alumnos. Los mismos niños
armaban arcos con las ramas de los árboles, y dirigidos por el
"Rebe" se ejercitaban en el lanzamiento de las flechas.
Estos juegos, y los paseos por campos y bosques, iban acompañados
de relatos sobre el heroísmo de Bar Cojva y sus hombres.
Fogatas.
En Medinat Israel se festeja "Lag Baómer"
con excursiones y competencias deportivas. Pero el carácter propio
de la celebración nocturna está dado por miles de fogatas
que jóvenes y adultos encienden en toda la extensión del
país. Alrededor de las mismas, pasan largas horas cantando y bailando.
Hay quienes suponen que esta tradición procede de la antigua costumbre
de encender fuegos en lo alto de las montañas, para anunciar a
los habitantes de aldeas y poblados el comienzo de un nuevo mes. Y tal
vez por el mismo medio se daban a conocer también las victorias
en la guerra.
Corte
de pelo a los niños.
El
día de "Lag Baómer", los Cabalistas discípulos
del Arí llevan a Meirón a sus niños
que han cumplido 3 años, para cortarles el pelo en ese lugar. Dicha
costumbre se suma a otras que expresan la interrupción de los días
de duelo dentro del cómputo del "Omer". El corte
de pelo es acompañado de un ritual que incluye canciones, danzas
y también tortas y vino.
Orígenes
de la festividad.
Pese
a los usos mencionados, los orígenes de "Lag Baómer"
permanecen inciertos. Se supone que el halo de misterio que envuelve a
la festividad responde a motivos históricos, ya que el hecho mismo
de fijar un día que recordara a los héroes de la rebelión,
constituía un desafío y un gesto de resistencia a los opresores,
y podía traer consecuencias no deseadas.
También
al pueblo mismo debía resultarle conflictiva la celebración
de una victoria que terminó siendo efímera.
Las
circunstancias habían cambiado. La insurrección reprimida
con la mayor crueldad y las duras leyes que le siguieron, no consituían,
por cierto, un motivo de alegría. De modo que los orígenes
de la festividad quedaron semiocultos, y sólo veladas alusiones
aparecen en ciertas leyendas talmúdicas. Ellas se refieren a una
grave epidemia que afectó a miles de jóvenes y terminó
con sus vidas. La epidemia se interrumpió en el día de "Lag
Baómer", y desde entonces ese día se festeja con
regocijo.
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