El primer ejemplo es el de tratamiento innovador en un programa de fertilidad del Centro Médico israelí de Hadassah que logró el nacimiento de un bebé que no posee la enfermedad a pesar de que el padre es VIH positivo.
En la actualidad, la Clínica del SIDA del Centro Hadassah tiene siete parejas que participan en el tratamiento especial de fertilidad y, hasta la fecha, alrededor de 40 parejas se acercaron al programa, que abrió hace ya un año.
La nueva clínica del Centro de SIDA de fertilidad utiliza una técnica de lavado que separa los espermatozoides sanos de todas las células que pueden contener el virus. Los espermatozoides sanos se utilizan para fertilizar el óvulo de la mujer a través de la inseminación intrauterina (IIU).
"La capacidad de las parejas a procrear a pesar del VIH, es un sueño hecho realidad para estas personas que han esperado tanto tiempo para crear una familia - y para nosotros también", dijo la doctora Karen Olshtain-Pops, Coordinador del Programa de SIDA del Centro Hadassah.
Después del anuncio del Centro Médico Hadassah, el instituto médico de Rambam también informó sus dos primeros nacimientos de bebés sanos, cuya madre es VIH positiva.
El bebé Hadassah fue posible gracias a la especial lavado de semen para eliminar el virus mortal, el de Rambam nacieron gemelos por medio de una especial fecundación in vitro.
En abril del año pasado, el hospital de Haifa creó su unidad de fecundación in vitro viral- el primero de su tipo en Israel- para ayudar a los portadores del VIH y las personas con otras enfermedades crónicas virales a tener bebés sanos. La unidad fue financiada conjuntamente por Centro Médico de Rambam y el Ministerio de Salud de Israel.
Fuente: Itón Gadol