El Consejo de ministros alemán, que preside la canciller federal Angela Merkel, acordó la creación de un banco central de datos sobre neonazis que concentre las informaciones de todas las instituciones y organismos responsables de perseguir sus crímenes y delitos."Se trata de combatir a la ultraderecha con los mismos instrumentos que los utilizados contra el terrorismo islámico", dijo el titular alemán de Interior, Hans-Peter Friedrich, tras el Consejo de Ministros que aprobó la creación de ese archivo.
El objetivo es posibilitar el "cruce efectivo de datos" para seguir los movimientos de neonazis catalogados como violentos (unos 9.500), entre el colectivo de 25.000 militantes de la ultraderecha.
Friedrich explicó el nuevo concepto de banco de datos sobre los neonazis acompañado del presidente de la Oficina Federal de Investigación Criminal (BKA), Jörg Ziercke, y del de Defensa de la Constitución (servicios secretos de Interior), Heinz Fromm.
Ziercke recalcó que el principal desafío al que se enfrenta su departamento, en materia de lucha contra la ultraderecha, es la creciente presencia de los denominados "autónomos nacionalistas", neonazis violentos no adscriptos a un partido legalizado.Las dos mayores formaciones ultraderechistas del país -el Partido Nacional Democrático (NPD) y la Unión del Pueblo Alemán (DVU)- aglutinan 10.000 militantes.
La creación del banco de datos sigue a la alarma desatada, el pasado noviembre, por las acciones de una célula neonazi que entre 2000 y 2007 asesinó a nueve inmigrantes y una agente policial.
La existencia de la banda se reveló de forma tardía y fortuita, tras el suicidio de dos de sus integrantes -Uwe Mundlos y Uwe Böhnhardt, de 38 y 34 años- seguido de la explosión de la casa que compartían con una mujer -Beate Zschäpe, de 36 años- en Zwickau (este de Alemania).La célula, identificada como Clandestinidad Nacionalsocialista (NSU), alternaba desde los 90 los atracos de bancos con los asesinatos de pequeños comerciantes (ocho turcos y un griego).