El oficial que habló en condiciones de anonimato, expresó que Turquía recibió ofertas de ayuda de docenas de país, entre ellos Israel; pero que hasta el momento ha rechazado todos los ofrecimientos.
El presidente Shimón Peres telefoneó a su homólogo turco Abdullah Gul para ofrecerle asistencia. Sin embargo, Gul respondió que esperaba que los equipos locales de rescate pudieran hacerse cargo de la catástrofe.
El ministro del Interior turco, Idris Naim Sahin, confirmó que más de 200 personas han muerto y se teme que otros cientos también hayan fallecido.
El ministro de Defensa, Ehud Barak, declaró que Ankara declinó la ayuda ofrecida por el Estado judío.
"Tengo la impresión de que los turcos no quieren nuestra ayuda", manifestó Barak.
"En estos momentos la respuesta es negativa pero si ven que precisan más ayuda y no la tienen, o si lo reconsideran; nosotros nos hemos ofrecidos y continuaremos dispuestos a (ayudarlos)", dijo el titular de la cartera de Defensa.