"Muchas cosas nos unen a Jorge Semprún", ha subrayado la FCJE por medio de un comunicado en el que apunta que el paso del escritor "por el campo de exterminio de Buchemwald desde los 20 a los 22 años fue una experiencia determinante" para que se acercara al pueblo judío.
"Consiguió sobrevivir, pero de allí se llevó dos recuerdos imborrables: el olor a carne quemada y el número 44.904 tatuado en su piel", subrayael texto de pésame.
Tras esa experiencia, y al igual de los demás supervivientes del exterminio, Semprún "reconstruyó su vida y construyó su obra con pedazos de sus recuerdos" y en sus obras "intentó explicar lo inexplicable con valentía y coherencia intelectual".
La FCJE recuerda en su nota que, en su visita a Buchemwald de hace un año, y su reflexión de que "todas las memorias europeas de la resistencia y el sufrimiento, solo tendrán, dentro de diez años, como refugio y baluarte a la memoria judía del exterminio".
Para la organización judía en España, "desaparece un testigo más de la barbarie; pero siempre nos quedará su obra, unos libros llenos de vida y amor a la vida".
Fuente: Agencia EFE