La carta -promovida por el presidente del Congreso Judío Mundial y diputado del partido Kadima, Shai Hermesh- está firmada por los portavoces de siete fuerzas parlamentarias que representan a 104 de los 120 miembros de la Kneset.
Entre los firmantes figuran los portavoces de los partidos actualmente mayoritarios como el Likud, Kadima, el partido Laborista o Israel Beitenu, además de otras fuerzas ortodoxas como el sefaradí Shas y el Partido Religioso Nacional.
No figuran entre los firmantes, sin embargo, otras fuerzas de izquierda como Meretz o el ex-comunista Hadash y los grupos parlamentarios árabe.
Las formaciones que suscriben la misiva forman parte del Gobierno de coalición israelí, con la excepción de Kadima y los Laboristas (ambos de oposición).
Los firmantes expresan su "rechazo al reconocimiento por Naciones Unidas de un Estado palestino declarado unilateralmente" y consideran que el recurso palestino a la ONU "socava resoluciones pasadas" de la organización internacional así como los acuerdos firmados entre Israel y la Autoridad Palestina.
El comunicado subraya que esos acuerdos están fundamentados en el principio de que "un acuerdo final entre ambas partes se alcanzaría mediante negociaciones que comprendiesen los diferentes puntos de controversia".
Por ello piden a la Asamblea General de la ONU que rechace la iniciativa y que "en su lugar llame a todas las partes a volver a la mesa de negociación para renovar el diálogo y esforzarse por lograr un acuerdo que garantice la paz, la seguridad y la prosperidad de los dos pueblos".
El presidente de la Autoridad Palestina (AP), Mahmud Abás, ha anunciado que pedirá unilateralmente este viernes al Consejo de Seguridad de la ONU la admisión del Estado palestino como miembro de pleno derecho.