Por su parte, Chulak es el actual mazkir de Habonim Dror, luego de haberse capacitado el año pasado en Israel.
P- Demián, ¿qué te llevó a involucrarte tan activamente en la política interna de la comunidad?
DS- Mis años en Habonim Dror fueron muy buenos, mi línea ideológica surge de ella y considero necesario ayudar que los jóvenes dejen de pensar en el día a día de su movimiento para que, cuando culminen su ciclo en la tnuá y si no deciden hacer aliá, no se alejen de la comunidad, sino que sigan involucrados. Y Avodá es uno de los marcos para que sigan activando en la comunidad, a la vez que estudian y trabajan.
P- Las tnuot tenían como ideología la aliá, ¿qué ocurre hoy en día?
DS- Hoy, esa gran ideología las tnuot ya no la tienen y se tienen que replantear qué tipo de ideología están continuando. Creo que están trabajando mucho socialmente en la Argentina, cosa que en pasados años de tnuá no lo hicimos; estábamos más centrados en la aliá, el kibutz, el socialismo.
P- Diego, ¿cuál es la ideología de Habonim Dror hoy?
DC- Básicamente es sionista. Hubo un replanteamiento, aceptando que quien no hace aliá siga activando en la Argentina. El sionismo no se olvida y la aliá sigue siendo parte de la educación que brinda Habonim Dror, pero se comenzó también a activar socialmente en la Argentina; es decir, principalmente para la comunidad, pero también para sus alrededores; por ejemplo, en comedores. Hoy por hoy intentamos involucrarnos en la sociedad argentina, sin olvidarnos -obviamente- de la educación sionista. Constantemente hay replanteamientos, pues año a año los contextos son otros. Habonim Dror sigue siendo Habonim Dror, pero de otra forma.
P- Demián, asumiste dos responsabilidades: representar a la comunidad en el Vaad Hapoel y activar en un factor comunitario. ¿Qué te moviliza a hacerlo?
DS- A nivel personal, es mi cable a tierra. Es salir de mi contexto normal de estudio y de trabajo, y actualmente es un gusto hacerlo. Al principio asistía al Comité Central y a las diversas actividades de Avodá porque era el mazkir de Habonim Dror. Fui buscando mi lugar dentro de Avodá, que lo encontré, y hoy mi impulso es poder ayudar a la tnuá, devolviéndole un poco de lo que le da a uno durante tantos años, y ayudar a que quienes terminen su ciclo en la tnuá continúen activando en la comunidad. Si bien hoy no pienso en hacer aliá, estoy completamente de acuerdo con la idea sionista y con darle impulso al judaísmo como pueblo.
P- Diego, ¿cómo hace Habonim Dror para captar y/o mantener a los chicos de 13-14 años en una sociedad consumista que tiene infinidad de ofertas interesantes para ellos?
DC- Es muy difícil, y cada vez lo es más. Apostamos a darles algo que los seduzca, brindarles una ideología fuerte, un marco en el cual se sientan cómodos y puedan hacer algo. Les damos actividades todos los viernes y sábados del año, realizamos majanot (campamentos), tenemos nuestra propia escuela de madrijim (instructores), de dos años de duración, y la escuela de bogrim, que es algo nuevo: un marco de capacitación, que tiene que ser constante. Para poder solventar su actividad, junto a las donaciones que recibe -AMIA, Habonim Dror Mundial, etc.-, Habonim Dror ha sacado una línea de vinos, pues los janijim (miembros de la tnuá) no realizan aportes, excepto uno muy pequeño los sábados, para la merienda que se les brinda.
P- Demián, hablás de “ideología sionista”. Por favor, definí a qué te estás refiriendo.
DS- Es muy difícil definir la palabra “sionismo”. Muchos me preguntan por qué no hago aliá si estoy identificado con el sionismo. Les respondo que también es bueno que se queden (en la Diáspora) algunas personas que piensan en el sionismo, como shlijim (representantes) locales, para ayudar en ese caso. El sionismo no es solamente aliá, es estar conectado con el Estado de Israel, seguir activando y ayudando en la comunidad, y también difundir la aliá. Todo lo que se identifica con el Estado de Israel tiene que ver con el sionismo porque hoy -para mí- la palabra “sionismo” cambió mucho. Tal vez en el pasado la palabra que se identificaba con el sionismo era “aliá”. Hoy ya no es así, y lo podemos ver en la cantidad de bogrim de las tnuot que hacen aliá ideológicamente: es muy chico ese número. En 2001 hubo una gran aliá, pero mucho más económica (que ideológica), y hubo mucho gente que volvió, también de las tnuot, cuando el país estuvo mejor. Tal vez habría que buscar otra palabra. Mi idea es que a los bogrim de Habonim Dror hay que decirles: la opción de la aliá es muy buena, pero si no la hacen, tienen que seguir activando e ir a Avodá. Mi función es acercarlos, pues cuando yo estaba en la tnuá nadie se acercaba a decirnos: “Chicos, vengan a activar a Avodá, involúcrense”. En la cadencia pasada, su presidente, Pablo Reisman, hizo que yo me integrase a la mazkirut (conducción) de Avodá, y en la actual, Sergio Borisonik hizo que los chicos de la tnuá entrasen a la mazkirut, y hoy Diego integra la Comisión Directiva. Creo que también es intención de Avodá ayudar a los chicos a seguir activando.
P- ¿Cuál es tu opinión sobre lo que está ocurriendo en la AMIA?
DS- Creo que hay que llevar la bandera que llevan Avodá y el Frente Comunitario: una lista de unidad en la que estemos todos incluidos, que el presidente sea elegido por consenso y que eso beneficie a la comunidad y no la perjudique, que creo que es lo que está pasando. Hoy se está dando un caso que nunca pasó y que se tiene que resolver eliminando los personalismos absolutamente de todas las listas. Pensar más en la comunidad, armar una lista de unidad y que no se llegue al extremo de hacer una nueva elección, como se está barajando.
P- ¿Qué ocurrió en el Frente Comunitario?
DS- Hay gente del Frente Comunitario que siguió otro camino. Hoy, el frente sigue existiendo. Avodá sigue perteneciendo al frente, y también parte de la gente de AMIA es de Todos. Lo que hizo esa gente, la que siguió otro camino, fue un error -no quiero usar la palabra “traición”- porque era un frente que internamente estaba bien armado.
P- Vos sos socio de la AMIA pero, ¿cuántos bogrim lo son?
DS- Muy pocos. Ése es un objetivo que tiene que lograr la nueva cadencia de la AMIA, sea quien sea el presidente: tratar de incluir a los jóvenes de mi edad y mayores, que hoy no están incluidos en la AMIA, ni en la comunidad.
Fuente: AJN (Agencia Judía de Noticias)