Argentina niega trato con Irán para frenar las pesquisas de atentados a AMIA y embajada
EFE/Aurora
El canciller argentino, Héctor Timerman, negó que su país haya acordado con Irán suspender las investigaciones por los dos ataques terroristas cometidos contra blancos judíos en Buenos Aires en los años noventa.
"Me han ofendido profundamente a mí y al Gobierno (con esa información) porque ningún Gobierno como el de Cristina Fernández ha hecho tanto en la búsqueda de justicia para las víctimas de la (mutualista judía) AMIA", señaló Timerman en declaraciones a radio La Red, de Buenos Aires.
El periódico Perfil publicó el mes pasado que el Gobierno de Fernández podría interrumpir la investigación de los atentados contra la embajada de Israel en Buenos Aires, perpetrado en 1992, y la mutualista judía AMIA, cometido en 1994, a cambio de mejorar las relaciones comerciales con Teherán.
En los ataques, atribuidos por Israel a grupos islamistas relacionados con Irán, murieron más de un centenar de personas.
"Fue una información falsa, una operación. La comunidad judía argentina, las víctimas y el pueblo saben que no va a haber nada que haga" que se deje de investigar, insistió Timerman desde Ucrania, donde participa de la conferencia internacional "25 años de la catástrofe de Chernóbil. La seguridad del futuro".
El canciller aseguró que siempre lleva "la causa AMIA" cuando viaja porque "es un caso nacional, de todo el pueblo argentino", y negó que en su reciente visita a Israel algún funcionario le haya preguntado sobre el asunto.
Israel, de todas formas, pidió a Argentina explicaciones sobre las informaciones aparecidas, según dijo Igal Palmor, portavoz del Ministerio de Exteriores, días después de la publicación del artículo y antes de la visita del canciller.
Perfil basó su información en un supuesto documento secreto iraní redactado tras el encuentro que Timerman mantuvo el pasado enero en la ciudad de Alepo con el presidente sirio, Bashar al-Assad, y su entonces homólogo Walid al Mualem.
En Israel, Timerman rehusó desmentir el supuesto acuerdo y recurrió a la Torá (el Pentateuco) para argumentar que "la persona que acusa tiene que traer la prueba" y no "la víctima" quien "debe probar su inocencia".
El ministro, judío, dijo en esa oportunidad que no tiene sentido que la inteligencia iraní elabore un informe sobre un presunto acuerdo que se supone que Damasco debería transmitir directamente a su aliado en Teherán.
Por otra parte, insistió en que Argentina no participa en el boicot comercial a Teherán y, por tanto, no precisa pacto secreto alguno para incrementar las relaciones comerciales bilaterales.