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La directora general adjunta para América Latina y el Caribe del Estado de Israel, Dorit Shavit, declaró que “esperamos la ratificación de la Argentina del tratado de libre comercio en el marco del Mercosur”, tal como lo hiciera el Parlamento israelí.

Asimismo, la cónsul general en San Pablo entre 1994 y 1999 destacó que “desde la creación del Estado de Israel existió amistad con todos los países de América Latina, y en especial con la Argentina, pese a que se abstuvo en la votación” por la “Partición de Palestina”, en 1947, que dio lugar al surgimiento de su país.

Sin embargo, “esa amistad no fue traducida en contenidos durante muchos años”, si bien esta situación cambió últimamente y “se firmaron acuerdos con la Argentina, Brasil, Colombia, países de Centroamérica y México, entre otros”.

Shavit explicó que Israel tiene un centenar de en embajadas y consulados generales en todo el mundo, incluidas las 13 embajadas en este subcontinente y el Consulado General en San Pablo, que fue recientemente reabierto.

Al respecto, destacó que “cuando asumió el canciller Avigdor Lieberman, en su primer encuentro con los directores del ministerio expresó su interés por estrechar los vínculos con nuestros amigos”, e inclusive él mismo “visitó la región en julio del año pasado, y meses después estuvo en Brasil y la Argentina el presidente Shimón Peres”, así como otros ministros.

La especialista en América Latina aseguró que “tenemos la voluntad de aumentar el comercio mutuo con los países” de la región y ya “hemos hablado con la Cámara de Comercio Argentino-Israelí para ver cómo lo hacemos”.

Por su parte, Igal Caspi explicó que su tarea como director general adjunto de Comunicación y Difusión “consiste en organizar la actividad diplomática pública de la Cancillería, fijar la línea de esclarecimiento e información y activar las distintas representaciones, para que la puedan ejecutar”.

América Latina “se encuentra hoy en una situación muy particular, que no se da en otros lugares con culturas más o menos parecidas”, analizó, en base a sus 30 años de carrera diplomática y sin dar detalles, quien hasta el año pasado fuera embajador en Corea del Sur.

Sin embargo, esto “facilita nuestra tarea, a partir de una cooperación mucho más estrecha con las distintas representaciones y también, estimo, entre las distintas comunidades”.

“El ministerio está pasando una especie de revolución -precisó Caspi- por la manera en que estamos implementando la tarea, con más actividad en lo concerniente a Internet y menos impresos, pero hemos comprendido que en este subcontinente a la gente la gusta tener algo en la mano y reevaluaremos que, tal vez, para esta parte del continente se requiera suministrar material impreso.”

En otras actividades de difusión y posicionamiento, el experto detalló que “creamos clips para difundir por YouTube y evaluaremos utilizar la radio”, mientras simultáneamente “fomentamos la llegada de periodistas para que puedan visitar y ver Israel”, ya que “ésa es la mejor inversión porque luego lo reflejarán en sus medios”.

“Intentamos, no siempre con éxito, evadirnos un tanto de la situación de conflicto y mostrar el desarrollo de Israel a lo largo de estos 62 años”, se sinceró Caspi, quien desaconseja “invertir en la respuesta inmediata al opositor, porque ya piensa así y será muy difícil que cambie; lo importante sería dedicarnos a muchísima otra gente que está oscilando en su pensamiento”.

Finalmente, el director general adjunto de Comunicación de Israel admitió que “el presupuesto para difusión es bajo, sólo 15 millones de dólares, y reconozco que los diplomáticos hacen mucho con ese (monto) escaso”.

EACh-CGG