Desde hace una semana, una página de Facebook llama a los jordanos a participar en una "marcha de un millón" de personas frente a la representación israelí en Amman.
Temiendo otro incidente violento como en el que casi lincharon a miembros del personal de la Embajada de Israel en El Cairo, el fin de semana pasado, el Gobierno de Jerusalén resolvió no tomar riesgos y cerró la delegación diplomática.
El personal
de la Embajada en Amman suele regresar los fines de semana, pero hoy volverán al país un día antes que lo usual.
Manifestantes jordanos exigieron el cierre de la Embajada de Israel en Jordania, tras la difusión de cables estadounidenses divulgados por Wikileaks discutiendo la posibilidad de que el Reino Hachemita se convierta en un hogar para los palestinos.
En una rara manifestación antinorteamericana –Jordania es un aliado cercano de Estados Unidos- cerca de 70 activistas quemaron banderas israelíes y estadounidenses frente a la representación en Amman.
Jordania tiene un población de 6 millones de habitantes, y alrededor de la mitad de ellos son de origen palestino.