Pesaj: El poder de tomar la iniciativa en tu vida
Estamos iniciando la celebración de Pesaj, el evento histórico en el que celebramos la salida del pueblo judío de Egipto, en donde éramos esclavos hacia la tierra prometida, en la cual pudimos afirmarnos finalmente como un pueblo de personas libres. Si bien Pesaj tiene múltiples significados y enseñanzas que han sido abordadas desde la Torá, Cabala y jasidísimo, en este caso me centraré en extraer una hermosa lección desde el plano psicológico que podemos aplicar a nuestra vida diaria.
Jung, famoso psiquiatra suizo y una de las mentes más brillantes del siglo XX, se refería acerca del poder del mito y los relatos ancestrales, como canales milenarios con la capacidad de mostrarnos caminos y recursos para abordar los desafíos de nuestra vida y crecer espiritual y emocionalmente.
En este relato que nos trae la Torá, desde el plano psicológico podemos observar 3 actores principales: El esclavo judío, Moisés y el faraón de Egipto.
Cuenta la Biblia que los judíos que habían emigrado a Egipto habían sido dominados por los egipcios, el pueblo conquistador, convirtiéndose en sus esclavos. Durante muchos años estos judíos esclavizados, sufrían amargamente este destino que se les había impuesto pero en definitiva, no hacían nada para modificarlo. Cuando Moisés es convocado por Dios para sacar a su pueblo del yugo del faraón, su primera reacción fue negarse aludiendo que tenía problemas en su habla (al parecer tartamudeaba). Sin embargo, Dios lo tranquilizó diciéndole que junto a él también iría su hermano Aarón, que oficiaría de portavoz. Moisés, pese a sus temores y dudas, confió en Dios y encaró su misión al enfrentarse al Faraón, que en aquella época era uno de los gobernantes más poderosos del mundo. Con su iniciativa y persistencia, logró sacar al pueblo judío de Egipto para encaminarse hacia la tierra prometida.
Los sabios estudiosos de la Torá estiman que aproximadamente 1/6 de los judíos esclavos de Egipto decidieron salir junto a Moisés rumbo a la tierra prometida. El resto, la mayoría, decidió permanecer como esclavos del faraón, aun cuando ello les generaba angustia, malestar y enormes sufrimientos.
¿Qué podemos aprender de Pesaj para incorporar a nuestra vida diaria?
Todos las personas, sin distinción de raza o religión, portamos los 3 actores principales de esta trama psicológica - ancestral: el judío esclavo, Moisés y el faraón. En cada uno de nosotros hay un aspecto similar a este judío esclavo que prefiere permanecer en una tierra conocida, siguiendo una rutina que puede aburrirnos, dañarnos o angustiarnos. Quizás hasta podamos quejarnos, enojarnos, pero de alguna manera nos “creemos impotentes” para hacer algo al respecto. Esto puede sucederte en diferentes situaciones: una relación de pareja en la que te sentís estancado o estresado desde hace mucho tiempo. Un trabajo que no te despierta pasión ni placer. O pueden ser relaciones familiares conflictivas en las cuales te sentís preso. Quizás hasta pueda ser decisiones que venís posponiendo, que podrían ser trascendentales e importantes para tu vida emocional y vincular, pero que en definitiva continuás alargando para no afrontar los riesgos.
Muchas personas eligen quedarse pasivas y sumisas en determinadas áreas de su vida, dejándose hechizar por la voz de su propio faraón. Este representa nuestro aspecto interno autoritario, rígido y descalificador que no desea cambios y que continuamente puede estar emitiendo opiniones negativas acerca de nosotros mismos. En mi consultorio psicológico he atendido muchas personas vitales e inteligentes que se sentían impotentes para generar cambios en aquello que realmente precisaban. ¿Qué les sucedía? Todas ellas escuchaban demasiado la voz de su propio faraón, lo cual las llevaba a sentirse desvalorizadas y carentes de la autoestima necesaria para tomar las decisiones necesarias para cambiar aquello que las perjudicaba.
Cuando no filtramos adultamente a nuestro faraón interior, podemos terminar infelices y estancados en nuestra neurosis durante mucho tiempo, tal como los judíos esclavos de Egipto. Sin embargo en esta trama también está Moisés, el judío criado en la corte del faraón que se animó a desafiar y liderar un cambio. Moisés representa aquel aspecto de nuestra psiquis capaz de desafiar los temores, cadenas y ataduras que pueden estar encadenándonos. Si escuchamos a este aspecto, la voz proveniente de nuestro “corazón valiente”, podemos comenzar a experimentar una vida de plenitud, pasión y energía. Todos podemos hacerlo. Pero precisamos entrenarnos para manejar apropiadamente a estos 3 actores arquetípicos que integran nuestra personalidad. No es una tarea sencilla ni fácil pero con la debida preparación podemos hacerlo, como lo hemos hecho miles de años antes. Puede que en este camino precises ayuda o guías experimentados. Pero elegir hacerte responsable de vivir tu libertad, es un derecho que si no lo ejerces, puede traerte innumerables sufrimientos. Por eso, ¿Cuáles son las situaciones de tu vida que permaneces pasivo y sufriente como un “esclavo judío”? ¿Qué elegís hacer para este Pesaj afín de comenzar a liberarte? ¿Qué iniciativa vas a tomar en relación a tu vida? Todo es elección… ¡Gracias a Dios!
Pablo Nachtigall – Psicólogo clínico y Terapeuta en Bioenergética
Web Profesional: www.pablonachtigall.com
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