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Una escuela en la que se estimula a los alumnos el placer de investigar y se los incentiva para que cada uno pueda crecer y desarrollar sus aptitudes y capacidades
En pleno barrio de Flores, en la calle Helguera 453, a metros de la avenida Avellaneda, se encuentra ubicada una de las más pujantes comunidades raigales de nuestra ciudad, Puertas de Sión, popularmente conocida por su nombre hebreo “Shaare Sión”, que dirige el rabino Isaac Rubén Yacar.
Esta institución, fundada en 1925, a lo largo de su existencia ha desplegado una intensa actividad educativa, que en la actualidad desarrolla en el Instituto Puertas de Sión, excelente escuela primaria y jardín de infantes raigal, su Yeshivá y en actividades no formales para niños y jóvenes.
El Instituto Puertas de Sión es una institución en la que los miembros de la comunidad permanentemente invierten esfuerzos a favor de la enseñanza y la educación de los niños, contando con un adecuado, moderno y amplio edificio en el cual se dictan las clases en aulas climatizadas, que además cuenta con laboratorio de Ciencias, de Informática, equipado con las últimas tecnologías, salas de proyección, sala taller, un salón de usos múltiples y natatorio.
Esta tarea la efectúan manteniendo una línea educativa ascendente, que ayuda al alumno a discernir y lo prepara para una próspera segunda etapa en su vida; tanto para su óptimo desenvolvimiento en los estudios de la Yeshibá como en los estudios de la escuela secundaria; pues sus responsables aspiran a que el egresado del Instituto Puertas de Sión – Shaare Sión encuentre su adecuada inserción, respetando las diferencias y las individualidades, pero inculcando a todos los alumnos, por igual, el Irat Shamaim (Respeto y amor por D’s) y la dulzura por el estudio de la Torá.
Para ampliar estos conceptos, Tribuna Judía entrevisto al Director General, moré Iejesquel Chama y a las directoras de las diversas áreas de la escuela, profesoras Ester Korman (Jardín de Infantes), Judith Lerman (coordinadora judaica del jardín de infantes), Graciela Pico (primaria área oficial) y Lea Mauas (primaria área judaica).
Cada uno de ellos, por separado, nos manifestó su satisfacción por trabajar en la institución, a la que ingresaron como docentes y luego fueron designados en los cargos directivos.
Respecto al Jardín de Infantes las profesoras Korman y Lerman nos explicaron que el mismo se inicia con las sala “maternal” para pasar luego los niños a las Sala de dos años, la Sala de tres años, que puede ser de medio turno o integral y las Salas de cuatro y cinco años, que son integrales.
En detalle nos explicó la profesora Korman que en las salas de dos y tres años se cumple con el programa de enseñanza oficial, en las que se incluyen temas judaicos; mientras que en las salas de cuatro y cinco años, que son de doble turno, se hace más hincapié a la mañana en la currícula oficial y a la tarde en lo judaico. Por ejemplo en la parte oficial se apoya todo lo que tiene que ver con los Jaguim, haciendo juegos matemáticos con todos los símbolos de los Jaguim.
La profesora Lerman acotó que lo que se busca es que los niños vivencien lo que se les enseña a la vez que lo relacionen con lo que se hace en sus casas, pues todos saben lo que es Shabat, Kashrut, los Jaguim, a la vez que les trasmitimos que lo importante es preguntar lo que no saben.
La profesora Pico nos dijo que la enseñanza del área primaria se dicta dividida en varones y niñas por separado, con el agregado que los grados superiores de varones están a cargo de maestros, mientras que los docentes de las niñas son mujeres, cumplimentándose en el turno mañana la currícula oficial, que además incluye talleres de plástica, tecnología, ingles, música, educación física, computación y ajedrez, que se incorporó en el corriente año, tanto para los varones como para las niñas a cargo de dos especialistas, un varón para los varones y una joven ajedrecista para las niñas.
Por su parte, la profesora Mauas nos dijo que el área judaica, que se dicta por la tarde, incluye la enseñanza de Hebreo, Historia del Pueblo de Israel, Torá, Neviim, Mishná, Guemara para los varones, Iadut y Dinim, Tefila, Perashat Hashabúa, Jinuj Learajim (Educación en Valores); Shira y Rikudim, inculcándose a los alumnos un mayor cumplimiento de las mitzvot guiados por los rabinos de la comunidad.
Un aspecto importante es el pase de los alumnos que culminan el jardín de infantes a la escuela primaria, sobre este tópico la profesora Pico nos explicó que se realiza un trabajo de articulación en las últimas semanas de año escolar, para que los chicos conozcan lo que es la primaria, momento en que se les presentan a los docentes, participan de talleres y de algunas clases.
También nos dijo que la escuela cuenta con un Gabinete Psicopedagógico y en forma permanente se capacita a los docentes, por ejemplo en Lengua, Matemáticas e Inglés, para que estén interiorizados de las diversas modificaciones que se establecen en la enseñanza de dichas materias y que también puedan, llegado el caso, trasmitírselo a los padres
El more Chama nos aclaró que esas capacitaciones se realizan por decisión de la escuela, además de las que el personal docente debe realizar anualmente por decisión oficial. Respecto al futuro nos manifestó que si bien el Instituto es una escuela comunitaria, tienen el problema que hay familias que dejan el barrio y que por lo tanto si bien año a año aumenta la cantidad de alumnos, actualmente superan los doscientos cincuenta entre jardín de infantes y escuela primaria, el incremento no es acorde a todo lo que ofrece la escuela, afirmando que “Esta es una escuela personalizada, sabemos que pasa con cada alumno en todas las áreas, donde el personal se reúne todo los días para analizar los hechos que ocurren, algo que no creo que pase en muchas otras escuelas. Esto es algo que saben los padres y para ellos es muy importante”.
Otro aspecto importante del Instituto Puertas de Sión, según el more Chama, es la permanencia del personal docente, pues no solamente las directoras tienen muchos años de trabajo en la institución, sino que también eso ocurre con los morim y eso “se nota en la preparación de los alumnos, ya que cuando terminan de cursar la primaria y continúan sus estudios, tanto en una Yeshivá como en una escuela secundaria raigal, se destacan, eso lo tenemos comprobado, pues les estimulamos el placer de investigar y los incentivamos para que cada uno pueda crecer y desarrollar sus aptitudes y capacidades”.
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