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La organización anti-misionera Yad L’Ajim ha lanzado una advertencia contra un nuevo centro budista que se está por inaugurar en la región del Aravá, en Israel.
Según dicha advertencia, recientemente se firmó un acuerdo entre el Consejo Central Regional de Aravá y una organización sin fines de lucro denominada “Sabiduría e Inteligencia”, por el cual se cede una superficie extensa en el Aravá para el establecimiento de una “universidad espiritual” que funcionaría según los principios internacionales del Budismo.
Según informó Yad L’Ajim, el proyecto está encabezado por Lama Dvora Tzvieli, una israelí que vive en los EE.UU.donde tuvo su primera aproximación al budismo (Lama es un título acordado al maestro o guía espiritual en el budismo). Otra investigación llevada luego a cabo por dicha organización descubrió que durante los contactos entre “Sabiduría e Inteligencia” y el Ministerio del Interior destinados a obtener los correspondientes permisos, no se habló ni una palabra acerca del budismo, y en todos los papeles referidos al proyecto simplemente se mencionan las palabras “universidad espiritual”, sin más detalles de otra índole. Esto pese a que todo el material distribuido por la organización, incluida la información en su página web en Hebreo, sugiere que el centro estará dedicado al estudio del Budismo Tibetano.
Una parte importante del Budismo es la devoción hacia el Buda, y esto incluye reverenciar las imágenes de Buda así como las de las religiones superiores, lo cual constituye literalmente un acto de adoración de ídolos, claramente prohibido por los Diez Mandamientos.
En su carta dirigida al Ministerio del Interior y al director del Consejo Central de la Región del Aravá, el rabino Shalom Dov Lifshitz, presidente de Yad L’Ajim, escribió:
“El Budismo es idolatría en el amplio sentido de la palabra y no caben dudas acerca de que se deben tomar todas las medidas posibles para detener la construcción de ese centro de idolatría”.
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