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Este concepto en hebreo es conocido como “tzadik verah lo”.
La respuesta no se puede encontrar en este mundo, sino en el mundo venidero.
Les quiero ofrecer algunos pensamientos para esta antigua pregunta.
Piensa en esta analogía: un niño está enfermo y la madre lleva a la criatura al doctor, que decide darle una inyección con un remedio. El niño piensa: “Estoy tan enfermo ¿Y ahora el doctor me produce más dolor?” La madre puede ver todo el cuadro, pero el pequeño solo puede ver su dolor. Así también Di-s “ve” todo el cuadro, pero nosotros solo podemos ver que se nos causa mas dolor.
En realidad, Moshe pregunto lo mismo, le dijo a Di-s: “Muéstrame tus caminos”. La guemará en el tratado de Brajot relata que la pregunta de Moshe realmente fue: ¿Por qué la gente sufre?, Di-s le respondió: “Cuando tu estés parado conmigo verás solo mi espalda, pero no mi frente.” ¿Qué significa esto? Di-s no es un ente físico. La respuesta es “solo cuando estés parado conmigo vas a poder entenderme, pero en este mundo (mundo material), tu nunca podrás entender mis caminos, porque un ser humano esta atado por tiempo y espacio.” La razón por la cual dice “la espalda de Di-s” es porque el hombre solamente puede entender retrospectivamente.
Hubo un joven jasídico que siempre iba lo de su Rebe cuando tenía sufrimientos, y el Rebe siempre rezaba por el joven. Esto hacía que él se sintiera mejor. Ocurrió que el Rebe falleció, y esta persona tuvo un sufrimiento aun mayor. Fue a la tumba de su Rabino y le dijo: Ahora estoy teniendo más sufrimientos que antes, por favor “habla bien de mí allá en el cielo.” Pero nada pasó. Entonces una noche su Rebe se le apareció en un sueño y le dijo “Yo no rece por ti, no porque sentía que tu no te lo merecías, sino porque ahora que estoy en los cielos tengo una perspectiva diferente. Cuando estaba en la tierra, siempre rezaba por ti. Porque pensaba que tu sufrimiento era algo malo, pero ahora que estoy en los cielos conozco todo el cuadro.”
Ninguna discusión sobre sufrimiento puede estar completa sin hablar del libro de Job.
Job era un hombre muy recto que sufrió muchísimo. En el Tanaj hay todo un libro que habla sobre él. Perdió a todos sus hijos, todo su dinero, finalmente su salud. Sus amigos vinieron a confortarlo, pero el no se dejaba. Finalmente el mismo vino a si mismo y se confortó. Di-s le mostró a Job el cielo y la tierra. No dice el libro lo que Di-s le dijo. Solo puedo adivinar lo que fue. Creo que cuando Job vio el cielo y la tierra, se dio cuenta que regalo puede ser la vida. Tal vez Di-s le debe haber dicho a Job que cada día la vida es un regalo y Job logró darse cuenta de todo lo que tenía, porque todos sus sufrimientos le mostraron una perspectiva diferente.
Una persona debe estar agradecida por todo lo que tiene. La vida es como un mantel bordado, uno lo mira de un lado y dice que es precioso, mientras que si otro lo mira del otro lado, no podrá entender porque tantos nudos y trazos sin sentidos. La parte de atrás tiene algunos hilos que son largos y otros que son cortos, algunas cebras que están atadas y otras que están cortadas.
Es solamente en una percepción retrospectiva que podemos entender lo que esta pasando, pero nosotros solamente podemos ver un lado.
Me he preguntado muchísimas veces porque estoy en una silla de ruedas, pero se que Di-s puede ver todo, y yo solo puedo ver mi sufrimiento.
Antes de estar en una silla de ruedas tenía miedo de la gente que estaba en esa situación. Ahora no tengo miedo, tengo compasión de ellos. Siempre pensé que era algo malo, pero ahora me doy cuenta que esta es una perspectiva infantil. Se que nadie piensa que soy repugnante, y eso siempre me sorprende. Siempre me asombro y estoy agradecida por la compasión que la gente muestra y me tiene. Muchas veces me apeno al pensar sobre mí en el pasado, una mujer violentamente independiente. Ahora soy físicamente dependiente para todo. Siempre pienso que por cada uno de los “no puedo” hay miles de “puedo”. Algunas veces hecho de menos a Esther en el pasado, pero ahora me doy cuenta de que Di-s tiene un plan. Nunca me vi como una persona que puede influenciar a gente, pero ahora me doy cuenta que la gente puede ser influenciada por mi. Tampoco nunca me vi como una escritora. Ahora estoy escribiendo este artículo. Di-s tiene que haber sabido todo esto porque El puede verlo todo.
Biografía del autor:
Cuando Esther Schwartz tenía 28 años fue diagnosticado que tenía esclerosis múltiple (MS).
Al pasar tres años, estaba confinada en una silla de ruedas, mientras la enfermedad lentamente le atacaba todo el cuerpo, incluso la habilidad de hablar y comer.
A pesar de esto, ella a comenzado a “componer” artículos relacionados con las dificultades que atraviesa por causa de esta enfermedad desde una perspectiva de una mujer judía observante.
Sus revelaciones y aptitudes son inspiradoras y confortables para todos los que la leen.
A pesar de que Esther perdió su habilidad para hablar, ella no ha perdido su habilidad de dirigir e irradiarnos con su actitud positiva al enfrentar la vida diaria y sus desafíos.
Esther es una mujer inspiradora, su mente esta 100 % intacta y su paciencia es una gran virtud.
Esther es la hija de sobrevivientes de campo de concentración. Sus padres fueron siempre luchadores por la vida. Esto le dio a Esther la posibilidad de aprender a sobrevivir a pesar de todas sus limitaciones.
Para poder “componer” este artículo ella se basa en un complicado y doloroso proceso en el cual se le dicta cada letra del alfabeto para cada palabra y en el momento que reconoce la letra que desea, trata de levantar su ceja y si no lo logra, de mover el labio, hasta completar así cada palabra y cada oración que compone el artículo; cada uno de estos es una gran realización para ella.
Esther recibió el premio de La Mujer de Valor entregado por la Federación Judía de Indianápolis en mayo del 2004.
Le Iluy Nishmat Ester bat Lipa
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