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Una bomba de fabricación casera que se encontraba dentro de una valija fue arrojada contra la histórica sinagoga que se encuentra en el centro de El Cairo, Egipto, provocando un incendio dentro de la misma. La policía informó que no hubo daños ni heridos.
El sospechoso huyó del lugar.
Según el informe policial, el sospechoso entró a un hotel ubicado en el cuarto piso de un edificio que está enfrente de la sinagoga, aproximadamente a las 3 de la madrugada. Mientras hacía su check-in al hotel, abruptamente arrojó su valija por la ventana. La policía sospecha que el hombre entró en pánico.
La valija contenía cuatro recipientes de gasolina, cada uno de los cuales estaba atado a una botella de ácido sulfúrico destinado a provocar destrozos con el impacto y activar la bomba incendiaria. La bolsa también contenía ropas, rollos de algodón, fósforos y un encendedor.
La policía egipcia reforzó la seguridad en torno a la sinagoga.
La comunidad judía de Egipto, que alguna vez fue floreciente, y que data de milenios, en los años 1940 contaba con unos 80.000 integrantes. La mayoría de ellos abandonó el país hace 50 años atrás a causa de las hostilidades existentes entre Egipto e Israel, pero igualmente persistió un número de sinagogas celosamente cuidadas, abiertas sólo a los judíos.
La sinagoga Shaar Hashamayim, construida en 1899, es la más grande de Egipto y la única que mantiene abiertos sus servicios.
Los diplomáticos israelíes asisten habitualmente allí en los Iamim Noraim.
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