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El miércoles 26 de mayo sesionó la Asamblea de Representantes de Asociados de la AMIA, luego de que se tuviera que esperar casi media hora del horario establecido para la segunda convocatoria, ya que recién a las 20.27 se logró el quórum estatutario: que estuvieran presentes 46 representantes de asociados.
El temario que se debía considerar era por demás importante: la Memoria del 115º Ejercicio Económico correspondiente al año 2009, el respectivo Balance General con todos los demás documentos contables y el Presupuesto para el corriente año.
Estos documentos fueron aprobados por mayoría, luego de amplio debate respecto a la Memoria, en el cual intervinieron los representantes de todos los bloques representados en la Asamblea excepto los pertenecientes al “Bloque Unido Religioso”, pese a las críticas que “Amia es de todos”, la lista que hace dos años tuvo como referente a Sergio Bergman, efectuó al documento en consideración y a su propuesta de no aprobarlo.
Las críticas de “Amia es de todos” tuvieron como objetivo expresar su desencanto por la manera en que el “Bloque Unido Religioso” no cumplió con lo que en primer término denominaron “no cumplir con los pactos acordados”, y que luego el vicepresidente segundo de la AMIA, José Scaliter, corrigió afirmando que eran “acuerdos programáticos”.
Los conocedores de la historia política interna de la AMIA saben que es tradicional que los representantes de asociados que no forman parte del oficialismo efectúen criticas a la Memoria y al Presupuesto, pero también que llegado el momento de votarlos lo normal es que lo aprueben “a fin de no perjudicar a la institución” o, como máximo, se abstengan en la votación, que es una manera de favorecer a que el “oficialismo” logre la aprobación de los documentos que son considerados.
Teniendo en cuenta esta tradición, la actitud de “Amia es de todos” sorprendió a más de un representante presente y obligó, por ejemplo a que las bancadas de Ávoda, y su desprendimiento “Plural JAI” expresaran que coincidían en la mayoría de las criticas pero que votarían por la aprobación “a fin de no perjudicar a la institución”.
Puesta a votación si se aprobaba o no la Memoria, la propuesta de no hacerlo de “Amia es de todos” obtuvo 6 votos, mientras que 40 representantes de asociados votaron por la aprobación.
Una situación similar se produjo cuando se consideró el presupuesto para el año 2010, aunque en esa oportunidad el secretario general de la AMIA, doctor Julio Schlosser evitó contar las manos de quienes las levantaron para votar por la aprobación, mientras era evidente de que los representantes de “Amia es de todos” no lo hacías.
En el caso de la consideración del Presupuesto se produjo una situación por demás llamativa. El representante de “Amia es de todos” entre las diversas objeciones que efectuó para justificar que no votarían la aprobación del presupuesto, mencionó que la partida correspondiente al Rabinato había aumentado en un 61% debido a que se había presupuestado la incorporación de un rabino que colaborara con el Gran Rabino Shlomo Benhamú, expresando que el mismo iba a ser “ortodoxo” y no liberal, a fin de que el Gran Rabinato de la AMIA sea pluralista.
Si bien ninguno de los representantes de la ortodoxia presente, ni tampoco los directivos de ese sector lo dijeron, nosotros sabemos que cuando se trató en la Comisión Directiva de AMIA la posibilidad de incorporar a un rabino “ortodoxo” en el Rabinato, para que colaborara con el Gran Rabino, los miembros de “Amia es de todos” no objetaron dicha que estaban presente: José Scaliter y Pedro Buki no se opusieron.
Que los representantes de “Amia es de todos” se enfrentaran a los del “Bloque Unido Religioso” era algo que se esperaba casi desde el mismo momento en que la actual conducción de la AMIA asumió.
Además, evidenciando su irritación con la presidencia y la tesorería de la AMIA, hicieron un llamamiento: “Dado que la Asociación Mutual Israelita Argentina no es toda la comunidad y los socios de la AMIA una mínima proporción y solo una primer minoría de solamente 3.500 votos asume posiciones en nombre de todos siendo altamente dificultosa lograr consenso, sugerimos restringir a la AMIA en su calidad de comunidad asquenazí ortodoxa de Buenos Aires hasta tanto se cambie esto”.
Este llamamiento además de desconocer una realidad, que un porcentaje significativo de los asociados a la AMIA son sefaradim y que por lo menos dos de los miembros de la actual Comisión Directiva lo son, es ofensivo y discriminatorio hacia esos asociados, algo que Alberto Chaieno, uno de los actuales vocales le recriminó aireadamente, sin lograr que quien la pronunciara, mejor dicho leyera, la retirara.
También es digno de mencionar que el representante de asociados Daniel Groisman, cuando se consideraba el Presupuesto, muy molesto, expresó que jamás se habían establecido “pactos” o “acuerdos programáticos” entre el Bloque Unido Religioso” y “Amia es de todos”.
Frente a esta diversidad de opiniones, lo único que podemos decir es algo que ya manifestando en oportunidad, cuando comentamos el desarrollo de la Asamblea Electora que eligió a la actual Comisión Directiva: Que el hecho que la tercera minoría, “Amia es de todos” votara de que el presidente y el vicepresidente primero de la AMIA fueran miembros del Bloque Unido Religioso, y que la vicepresidencia segunda le fuera otorgada a un miembro de la tercera minoría en lugar de hacerlo con la segunda minoría, como era lo tradicional, daba a entender de que había existido conversaciones y algún tipo de pacto, o como lo denominó José Scaliter “acuerdos programáticos” entre la primera y la tercera minoría.
Para nosotros, un medio de prensa comunitario, lo importante no es que ahora lo nieguen, sino que se los intente utilizar como parte de una campaña electoral con vistas a la próxima elección de la AMIA que lo más probable es que se realice en abril 2011.
Otro hecho que entendemos es que motivo al presidente de la AMIA, Guillermo Borger, y al secretario general, Julio Schlosser, a no responder las críticas que se les efectuó a la Memoria y al Presupuesto, algunas de las cuales los afectaban directamente a ellos, cuando por ejemplo afirmaron, palabras más palabras menos, que viajaban en exceso.
Como decimos más arriba, desde hace tiempo esperábamos que se produjera este enfrentamiento, pero no nos imaginábamos , o mejor dicho, considerábamos que algún representantes del “Bloque Unido Religioso” y Guillermo Borger dijeran lo suyo y no que ocurriera lo que ocurrió, que privilegiaron que los puntos del Orden del Día se aprobaran a defender su manera de gobernar la AMIA.
Cómo y cuando continuará desarrollándose la campaña electoral para las elecciones de AMIA del 2011 no lo sabemos, pero estamos seguros que lo ocurrido en la Asamblea que estamos comentando, es el inicio de un proceso que se irá profundizando
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