|
Pese al tiempo transcurrido consideramos que es importante que nuestros lectores tomen conocimiento de circunstancias ocurridas en los actos conmemorativos del el “Día Internacional de Conmemoración Anual en Memoria de las Víctimas del Holocausto”, establecido por Naciones Unidas por medio de la resolución 60/7, en coincidencia con el día que en 1945 el ejército de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas ingresó al campo de exterminio nazi Auschwitz-Birkenau (Polonia), el 27 de enero.
En Buenos Aires se efectuaron tres actos: el organizado por el Gobierno Nacional, por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires – CABA y la Fundaci{on Memoria del Holocausto-Museo de la Shoá y un encuentro del Jefe de Gobierno CABA, ingeniero Mauricio Macri con sobrevivientes de la Shoá.
El Gobierno Nacional llevó a cabo el acto en el salón de actos del Banco de la Nación Argentina. Durante el mismo hicieron uso de la palabra el secretario de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde; el Secretario de Culto, Guillermo Olivieri; el ministro de Educación, Alberto Sileoni; y el Ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, Julio Alak; el presidente de la DAIA, Aldo Donzys; y brindó su testimonio un sobreviviente de la Shoá, la señora Rosa Rotenberg fue a quien leo correspondió la responsabilidad de hacerlo, una doctora en química con prestigio internacional en su profesión, quien se salvó pues a los seis meses fue ocultada en un convento católico polaco, en el que permaneció hasta la finalización de la Segunda Guerra Mundial fue a retirarla su padre que también sobrevivió, cosa que no ocurrió con su madre.
De este acto deseamos resaltar, en primer lugar, que los miembros del Gabinete Nacional que hicieron uso de la palabra relacionaron el Holocausto contra el pueblo judío con los desaparecidos durante los años 1976 a 1983 y contestaron, sin nombrarlo, a los dicho horas antes por el ex presidente Eduardo Alberto Duhalde.
Como ejemplo transcribimos párrafos del discurso del ministro de Justicia, para el primer caso lo hizo diciendo “Aunque hay marcadas diferencias entre el Holocausto y la dictadura argentina de los años 70, se trata de acontecimientos atravesados por características comunes, como la crueldad, la intolerancia y la degradación humana (…) “ambos genocidios pretenden ser banalizados por supuestos referentes intelectuales y políticos bajo miles de ignominiosas metáforas, que van desde la simple negación del Holocausto hasta, salvando toda proporción, la solicitud de impunidad para los militares comprometidos con la represión ilegal en nuestro país”.
También que el presidente de la DAIA, dedicó dos tercios de su discurso al motivo del acto, la Conmemoración del Día Internacional del Holocausto y el resto a señalar lo que significa la profanación de los cementerios judíos y a criticar al régimen iraní.
Sobre estos dos últimos temas: afirmó “Cuando asistimos horrorizados a la reiterada profanación de cementerios y tumbas judías en nuestro propio país, no podemos sino reaccionar con indignación frente a estos ataques aberrantes. ¿Puede concebirse lo que significa para cualquier miembro de la comunidad judía el visitar la tumba de un ser querido y encontrarla agraviada con inscripciones de cruces esvásticas, el siniestro símbolo bajo el cual fueron asesinado sus antecesores? La DAIA lleva un registro pormenorizado de todos los ataques antisemitas. Solo a partir del año 1987, en que se comenzaron a auditar minuciosamente estos hechos, se han perpetrado 38 ataques contra cementerios judíos en nuestro país, y se han profanado cerca de 1000 sepulturas. ¿Cuál es el hilo conductor de estos hechos? La impunidad. Hace pocos días la pequeña comunidad judía de San Luis fue víctima de una profanación sin precedentes, con proliferación de agravios dignos de los jerarcas nazis” y “Cuando hoy asistimos con estupor e indignación a expresiones que niegan el Holocausto, o que pretenden minimizarlo incluso en boca de algún jefe de Estado, no podemos menos que expresar la satisfacción por la decisión adoptada por un prestigioso grupo de juristas, dirigentes políticos, académicos, dirigentes de Organizaciones no Gubernamentales de diversas nacionalidades y credos, que liderados por el ex ministro de justicia de Canadá Irwin Cotler, han formulado una petición a los gobiernos y las Naciones Unidas para una masiva acción diplomática y económica contra Irán. Entre otros conceptos se refiere específicamente al delito de incitación al genocidio por parte del presidente de ese país, delito previsto en el artículo 3º de la convención contra el genocidio de la ONU. El petitorio solicita que el Consejo de Seguridad de la ONU eleve las acusaciones a la Corte Penal Internacional. Formulamos un llamado a los gobiernos democráticos, en especial a los de nuestra América Latina: Al líder iraní no deben rendírsele honores sino recriminarle sus horrores, y hacerlo responsable por ellos. No permitamos el desarrollo de ghettos fundamentalistas cuyo único objetivo es la ideología de la destrucción, la violencia, la muerte”.
El Gobierno de CABA, decidió adherir a la Conmemoración plantando 6 árboles en homenaje a los 6.000.000 de judíos asesinados por el nazismo durante la Shoá, en la Plaza de las Naciones Unidas, cita en la avenida Figueroa Alcorta al costado de la Facultad de Derecho de la UBA.
El acto, realizado el 26 de enero, casi al finalizar la tarde, contó con la presencia de los ministros de Ambiente y Espacio Público, Diego Santilli, y de Educación, Esteban Bullrich y del el director general de Relaciones Institucionales de la Secretaría General, Claudio Avruj, del Gobierno de la Ciudad, quienes hicieron uso de la palabra y la asistencia de los presidentes de la AMIA y de la DAIA, Guillermo Borger y Aldo Donzis respectivamente; del Consejero de la Embajada de Israel en Argentina, Lior Ben Dor y dirigentes de varias instituciones judías.
A diferencia de lo dicho por los miembros del Gabinete Nacional, el ministro de la Ciudad, Diego Santilli - entre otros conceptos - manifestó: “Estamos haciendo este homenaje a las víctimas de la Shoá que fue algo tremendo para nuestro mundo, pero también fue tremendo para los 6.000.000 que sufrieron ese Holocusto, y que entre ellos había 1.500.000 chicos, lo que habla de cuando un mundo está perverso, de un odio de quere exterminar a otro pueblo y que genera este tipo de genocidio, la Shoá, que hace que la humanidad entré en un colapso y una crisis brutal que tiene que llamar a la reflexión, y me parece que plantar árboles marca lo que nosotros tenemos que pensar como sociedad. Un árbol requiere de tierra, de sol, de agua, lo mismo que nuestros hijos, que requieren de tolerancia, de paz, de armonía para crecer y desarrollarse en un mundo que cada vez es más complicado y que nos exige más tolerancia, más inclusión, más participación. Esto es lo que para mí muestra este símbolo que es la plantación de un árbol: un futuro por venir, un camino donde recorrer y donde el tiempo que marca el aprendizaje y la paciencia que tenemos que tener como seres humanos y como ciudadanos, y por otro lado marca lo que no tenemos que olvidar y no dejar de recordar, sentir y pensar como seres humanos.
Finalmente nos referiremos al acto efectuado en el Museo de la Shoá, que consistió en la inauguración de la muestra “Piensen que esto ha sucedido”, integrada por trabajos realizados por los alumnos de primer año de la Escuela Superior de Creativos Publicitarios (en su gran mayoría no judíos), en base a lo estudiado en la materia Arte, dictada por la profesora Verónica Salgado, también no judía.
Si bien en casi todos los discursos pronunciados se planteo la necesidad de no banalizar el Holocausto, creemos que una forma de evitarla es lograr que estas conmemoraciones se circunscriban al objetivo de la Resolución 60/7 de las Naciones Unidas: “Reafirmando que el Holocausto, que tuvo como resultado que un tercio del pueblo judío e innumerables miembros de otras minorías murieran asesinados, será siempre una advertencia para todo el mundo de los peligros del odio, el fanatismo, el racismo y los prejuicios…”.
|
|
|
