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Tal cual estaba previsto, el pasado lunes 2 de noviembre, se llevaron a cabo las elecciones de DAIA ara elegir a los integrantes del Consejo Directivo y los Revisores de Cuentas para el período 2009-2012.
Algunas alternativas previos enrarecieron la denominada “campaña electoral”, lo que según OSFA-WIZO ameritaban la postergación del acto electoral para dentro de 6 meses, de acuerdo a una nota presentada a la actual conducción que el Consejo Directivo consideró el lunes 26 de octubre, resolviendo rechazar esa solicitud debido a que se habían realizado todos pasos establecidos en el Estatuto.
Es que a partir de mediados de octubre comenzaron a circular rumores y versiones: sobre la aptitud de algún candidato; la realización de acuerdos entre dirigentes a espaldas de las conducciones de sus instituciones; la existencia de presiones a instituciones, relacionadas con lo económico, para que voten a cierto candidato.
Si bien nada de esto puede probarse, sabemos que en los últimos años las “campañas electorales” comunitarias se asimilan cada vez más a las de los clubes de fútbol, aunque por suerte todavía no se utilizan “barras bravas”.
Si la existencia de esos rumores y versiones era de por sí preocupante, el lunes 26 al mediodía se difundió la noticia que el fiscal Alberto Nisman había solicitado al juez federal Ariel Lijo que cite a declaración indagatoria a Agustín Zbar, en la querella que Nisman le iniciara acusándolo de coacción agrabada.
Por qué Nisman no esperó hasta después del 2 de noviembre para hacer esa presentación fue una pregunta que se reiteraba en cada reunión comunitaria. Para algunos Nisman lo que buscaba era perjudicar a Zbar, mientras que otros interpretaban la medida como una nueva presión para lograr que Zbar renunciara a su postulación
En los días subsiguientes, mientras Zbar reiteraba que no se había “bajado”, en los corrillos se decía que lo haría a último momento, cosa que en cierta medida ocurrió, ya que el domingo 1 de noviembre se publicó, en el diario La Nación, una nota de Jaime Rosenberg en la cual se anunciaba que Zbar había decidido renunciar a su postulación.
Ese mismo día al Agencia Judía de Noticias publicó, en su página web, un comunicado de Zbar en el cual informaba que había tomado esa determinación motivado por lo que considera una campaña en su contra que “interfirió gravemente el proceso electoral y afecta mi posición como candidato, ya que no puedo comprometer a la comunidad toda en una disputa en la que maliciosamente el Sr. Nisman me ha involucrado” y también afirmar “El proceso electoral de la DAIA viene siendo atravesado por una serie de graves irregularidades que afectan su transparencia. No ha existido debate alguno de ideas y se me han puesto trabas para formular mis propuestas”.
Inmediatamente el fiscal Nisman le respondió, por el mismo medio, afirmando que Zbar al saber que perdería la elección “Rápido de reflejos, y a fin de evitar un papelón que su ego no podría soportar, Zbar decidió bajarse de su candidatura y encontró la excusa justa en una causa que le inicié hace más de 5 meses, y donde hace ya una semana pedí que sea citado a prestar declaración indagatoria por haberse reunido una serie de elementos que demuestran su clara autoría en las amenazas agravadas que me profirió”.
Antes iniciarse la elección, luego de efectuada la Asamblea Ordinaria de la DAIA en la cual se aprobó la Memoria y el Balance del último ejercicio cerrado el 30 de junio, cuando la presidente del Comité Electoral, doctora Irene de Weiss, dio lectura a las renuncia de postulaciones recibidas, la presidenta de la OSFRA-WIZO, Amalia de Polack, informó que la institución retiraba las postulaciones presentadas: Elisa Plotnic y Estela Vilanovsky, la primera a la vicepresidencia tercera y una vocalía titular y la segunda a la prosecretaría primera y una vocalía titular. Los motivos de esta medida los brindaba una nota presentada a la Asamblea, de la cual transcribimos su parte medular: “OSFA, federación Argentina de WIZO Mundial […] se presenta ante esta Asamblea y expone. Considerando: A) El ambiente enrarecido dentro del cual se desarrolla el proceso electoral. B) El aluvión de candidatos cuyos antecedentes y capacidades son totalmente desconocidos. C) Los arreglos preelectorales de quienes no integran la DAIA y pretenden coparla, en desmedro de su legitimidad. D) Los entrecruzamientos que otras instituciones de segundo grado efectúan sin consultar a sus instituciones adheridas. E) La falta de información, desde la Comisión Electoral (no se distribuyeron las listas de candidatos ni sus antecedentes y condiciones para el cargo, condición indispensable por las características especiales de la DAIA Para no abundar en mayores razones que llevan a tomar esta decisión el Ejecutivo de OSFA – WIZO Argentina decide abstenerse en esta elección mientras revisa su futura relación con DAIA”.
Al iniciarse la elección propiamente dicha, la doctora Weiss proclamó a Aldo Donzis como presidente electo para el próximo período y se paso a votar la vicepresidencia primera, para la que eran candidatos Ángel Schindel y Pablo Taraciuk, el primero integrante del “equipo” de Donzis y el segundo del de Zbar. Mientras se esperaba que los representantes de las instituciones adheridas habilitadas y de las Filiales DAIA votaran, escuchamos que en uno de los corrillos se estaba comentando algo que para esos dirigentes era muy extraño: que Agustín Zbar hubiera sido postulado por Ajdut Israel, modificando una postura institucional de años pues, según decían, los miembros de esa institución que fueron directivos de la AMIA y de la DAIA siempre habían sido postulado por los factores religiosos como Agudath Israel o Mizraji y no por Ajdut Israel.
Ángel Schindel obtuvo el 69% de los 111 votos emitidos mientras que Taraciuk logró el 25%. Al conocerse este resultado, renuncio a su postulación a la vicepresidencia segunda David Michan, también integrante del “equipo” de Zbar, siendo electo para ese cargo Sergio Witis.
La votación de la vicepresidencia tercera fue la única que necesito de segunda vuelta entre los dos candidatos más votados de la primera: Julio Schlosser y Alberto Hammerschlag, y la que también produjo una situación posible pero no prevista en el reglamento electoral, el empate. Ante este hecho, y luego de varios conciliábulos se resolvió que estos dos dirigentes compartirían la vicepresidencia segunda.
Fabian Galante fue electo secretario general y Ariel Cohen Sabban fue proclamado tesorero pues el restante postulado había renunciado a la postulación.
La elección se prolongó hasta pasadas las 23.30 hs. (la nómina completa de los electos la brindamos en otro lugar de la presente elección) y al finalizar Aldo Donzis felicitó a los electos como también a todos los que participaron en la elección, y agradeció muy especialmente a los funcionarios y personal de la DAIA por la colaboración prestada.
Este proceso electoral, que consagró la reelección de Aldo Donzis para un nuevo período al frente de la DAIA, tuvo ciertas alternativas por demás desagradables, en muchos casos impulsadas por ciertos “referentes” institucionales que parecieran no darse cuenta que actuando de la manera en que lo hacen, perjudican a toda la comunidad. Esperamos, y deseamos, que no influyan en el normal desenvolvimiento de la DAIA.
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