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El proceso de radicalización de los musulmanes en Europa es un fenómeno que parece haberse ampliado en estos últimos años. Los servicios de información de distintos países europeos describen un “cambio de los jóvenes fundamentalistas inclinados hacia el islamismo, primero, y luego hacia el terrorismo”. La captación de los jóvenes musulmanes por parte de grupos integristas se efectúa, en particular, por medio de escuelas y organizaciones musulmanas que se presentan como caritativas, de movimientos de jóvenes y asociaciones de barrio, en zonas donde existe una fuerte concentración de inmigrantes musulmanes. Preocupada por este fenómeno, la Unión Europea encargó a su coordinador para la lucha antiterrorista, Gilles de Kerchove, que elaborara una estrategia de acción para encauzar este proceso. “La UE debe desarrollar un plan de acción a largo plazo para encauzar la radicalización de algunos musulmanes”, destacó el Sr. de Kerchove, en el momento de presentar su programa, en una reunión de Ministros europeos de Justicia e Interior. Para alcanzar estos objetivos, el coordinador europeo cuenta con la experiencia específica adquirida por los distintos países miembros de la Unión Europea. Particularmente Alemania deberá compartir sus conocimientos en cuanto a cómo vigilar los sitios islamistas en Internet, mientras que España comunicará sus experiencias respecto a cómo reducir la influencia de las corrientes islamistas radicales en los institutos de formación de los imanes. Además es necesario luchar contra el adoctrinamiento de los musulmanes que purgan una condena en prisiones europeas.
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