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Comedores populares “Meir Panim” en Jerusalem.
Unos 45.000 israelíes se agregaron a las cifras de “pobreza”, según un informe anual del National Insurance Institute (NII), el instituto de seguro social de Israel. Al mismo tiempo el nivel de vida de muchos israelíes aumentó en la primera mitad de 2007.
Según el informe, 1.674.800 israelíes se encuentran actualmente bajo la línea de pobreza, es decir, la cual se ubica en un cálculo de ingreso mensual de 2.028 shékels por persona y de 5.191 shékels por familia de cuatro. Unos 804.000 niños –el 36% del total de niños de Israel- viven en la pobreza.
En 2006, 35.2% de los niños israelíes vivían en la pobreza; en 2007 esa cifra aumentó a 35.8%. El número de familias viviendo en la pobreza también aumentó en 2007, de un 20% anterior a un 20.5%, alcanzando un total de 420.000 familias.
Según el informe la pobreza aumentó tanto entre árabes como entre judíos. El número de familias judías bajo la línea de la pobreza aumentó de un 14.7% a un 15.2%, en tanto que el número de familias árabes pobres aumentó de un 54% a un 54.8%. Las zonas más pobres siguen siendo el Neguev, la Galilea y Jerusalem.
Hay también datos alentadores: el informe muestra que hubo mayor empleo entre los israelíes durante el mencionado período –un 2% superior al de finales de 2006. Los empleados también tuvieron un ingreso de un 1.6% más en proporción con la tasa inflacionaria, y el promedio mínimo para todos los trabajadores también subió un 3.6% (ajustado según la inflación).
El nivel de vida de las personas de mayor edad también experimentó un descenso.
Los pequeños aumentos en los ingresos de los trabajadores no satisfizo a la mayoría de los miembros del Parlamento. El diputado Rabi Meir Porush (Judaísmo Unido de la Torá), declaró que el gobierno estaba escondiendo la cabeza bajo la tierra para evitar enfrentar los problemas. “El gobierno está haciendo todo lo posible para aumentar la bracha existente entre ricos y pobres y se negó a aumentar el presupuesto de bienestar para solucionar los problemas”, dijo.
Tanto los diputados de la derecha como de la izquierda israelí criticaron el modo de conducción económica del gobierno.
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