La detección de material explosivo es una prioridad absoluta en todos los aeropuertos del mundo. Por lo tanto, ¿qué mejor para tal fin que inventar un aparato que imita la nariz humana, literalmente “olfateando” algún material explosivo de fabricación hogareña transportado por presuntos terroristas?
El “Mini-Nose” (“pequeña nariz”) de fabricación israelí es portátil y de alta sensibilidad y recrea, en forma digital, el proceso olfatorio que detecta señales de determinadas partículas.
El artefacto está conformado por dos piezas que detectan explosivos manuales, fue fabricado por una empresa de Tecnología de Detección de Escencias, en Herzlía, y fue diseñado de acuerdo a instrucciones proporcionadas por organizaciones de seguridad, tanto de Israel como de los EE.UU., incluyendo al Departamento de Seguridad Territorial y al Pentágono. Según el Vicepresidente del departamento comercial de la Compañía, Doron Shalom, el aparato puede registrar “olfativamente” distintas señales de explosivos químicos y tiene un precio mucho menor y una garantía mayor de funcionalidad que otros artefactos detectores de explosivos ya existentes.
“Nuestra tecnología es portátil, confiable, adecuada en su costo, y puede detectar incluso los explosivos improvisados de modo sencillo y rápido”, dice Shalom.
El Mini-Nose ha obtenido el prestigioso Premio Frost & Sullivan a la Innovación Tecnológica, en 2006, y más recientemente, en 2007, el Premio de Bronce en la categoría del mejor Diseño Industrial de Instrumentos Analíticos Portátiles.
Según Shalom, el artefacto está preparado para examinar prendas de vestir, equipaje, tarjetas de identificación, tickets, carga y contenedores, detectando cualquier tipo de explosivos químicos rápidamente, reemplazando a los actuales productos lentos y costosos basados en materiales radioactivos. Esto lo hace accesible para usar en puestos de control de autos, terminales de aviones y barcos, y en cualquier lugar de inspección primaria.
“Esta tecnología nos permite registrar cualquier escencia o molécula de la naturaleza; actualmente nos estamos focalizando en los explosivos, pero en el futuro la aplicaremos a la creación de sensores para detectar narcóticos y otros agentes químicos o biológicos, como así también para la seguridad del agua”, afirmó Shalom.
|
|
|