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Los ancianos de Tiberiades no recuerdan un evento tan alegre y emotivo como fue el hajnasat sefer Torah que se realizó en la primer sinagoga jasídica de Eretz Israel, Mesivta D’Rabbeinu Yochanan.
El libro de Torah fue donado por la pequeña comunidad jasídica de Tiberiades en memoria de Reb Yitzjak Ungar, z”l, quien falleció el pasado Pesaj. Reb Yitzjak pasó diez años de su vida en una prisión de Siberia sobreviviendo sólo a base de sopa y cáscaras de papas.
Al regresar de Siberia, la mafia rusa asesinó a su mujer y a su hija frente a sus ojos. Pero a pesar de todas estas cosas terribles el espíritu de Reb Yitzjak permaneció fuerte, y hace dieciséis años hizo aliá. Se instaló en Tiberiades donde fue famoso por su personalidad alegre y benévola, así como también por su vibrante alma jasídica.
La sinagoga fue en el pasado un lugar de oración central para miles de jasidim que vivían en la ciudad, pero hoy en día hay apenas veinte familias ashkenazi que viven en ese barrio y fueran ellas quienes donaron el libro de Torah para la sinagoga jasídica.
“No hay una manera más apropiada que esta celebración alegre y emotiva para conmemorar a éste judío”, dijo el gabai de la sinagoga, Reb Yosef Schaefer. “No tengo duda alguna de que la elevación espiritual que sentimos durante el evento será un mérito para éste querido judío, que hizo Kidush Hashem tanto en público como en privado”.
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