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La siguiente es una carta escrita el 18 de Elul de 5690 / 1930 hacia los líderes de la comunidad que se habían reunido en Berlín para analizar el tema de la observancia del Shabat:
Quise mucho acompañarlos en la reunión que realizaron con el objetivo de fortalecer la observancia del Shabat, que con nuestros pecados ha sido seriamente debilitada en nuestras comunidades. Pero mi edad avanzada y debilidad no me permitieron participar.
¡Mis hermanos y colegas! Se han reunido aquí por una causa noble y sagrada. Se sabe que el Shabat es igual en su valor a todas las mitzvot de la Torá. Es el respiro vital de toda la nación judía y demuestra nuestra conexión con nuestro Padre en los Cielos. Es el símbolo eterno de nuestro pacto con Él, según dice la Torá, “El pueblo de Israel ha observado el Shabat, para hacer del Shabat un pacto eterno para las generaciones. Es un símbolo entre Yo y entre el pueblo de Israel para siempre”…
Todo aquel que observa el Shabat es considerado como alguien que observa toda la Torá y aquel que lo profana es considerado como alguien que adora ídolos e infringe todas las mitzvot de la Torá. El pueblo judío ha siempre guardado la santidad del Shabat con celo y ha dado su vida con tal de no profanarlo.
Con nuestros numerosos pecados, últimamente la santidad del Shabat ha sido agrietada y mucha gente profana el Shabat de manera abierta. Este es el resultado del pesado yugo de vivir en el exilio y de la erosión del conocimiento de la Torá. Para el bien de nuestra nación, debemos incrementar nuestros esfuerzos para enseñar a nuestros hermanos la importancia del Shabat, la seriedad del pecado de profanarlo, la gran recompensa prometida para aquel que lo observa, y sus leyes básicas, para inspirarlos con un renovado fervor hacia la santidad del Shabat. Hay que organizar grupos de estudio sobre las leyes del Shabat, siempre que sea posible, ya que el estudio sobre el Shabat es la mejor manera de asegurar su observancia, según enseñaron Jazal, “Hablar sobre la mitzva hace que la gente la cumpla”. Es obvio que este es el motivo por el cual la Torá enfatiza que recordemos el Shabat – debemos tenerlo en mente para que nunca lo profanemos, que Di-s no lo permita.
Espero con fe la redención de Hashem.
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