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Se ha anunciado un proyecto de renovación para el Monte de los Olivos por parte de la Municipalidad de Jerusalém y la Oficina del Primer Ministro. El proyecto fue iniciado por el intendente de la ciudad, Rabí Uri Lupolianski y costará unos 100 millones de shekels (alrededor de 22 millones de dólares).
La tarea incluye la limpieza y reparación de decenas de miles de tumbas y lápidas, mejoras en la seguridad del área, la construcción de un muro que rodeará el área de las tumbas, la construcción de muros de apoyo y nuevos caminos y la construcción de un complejo de información. El centro también tendrá salas de lectura y plegaria.
El personal podrá responder consultas respecto a la ubicación de tumbas específicas.
Gran parte del costo de este proyecto correrá por cuenta de donaciones contribuidas por la comunidad judía de Canadá.
Entre aquellos que están enterrados en el Monte de los Olivos están los profetas Zejaria, Jagai y Malaji, Rabí Iehudá HaJasid, Rabí Jaim Ben-Atar, el Rashash (Rav Sharabi), varios Guerrer Rebes, Rav Nosson Zvi Finkel, Rav Iejezkel Sarna, Rav Jaim Sonnenfeld y otros famosos rebes y grandes de Israel. Hay una propuesta de colocar carteles para ayudar a los visitantes a localizar estas tumbas.
Descubren un camino de la época del Segundo Templo
Eljanan Adams, Jerusalén
Arqueólogos israelíes han descubierto un camino del período del Segundo Templo que llegaba de la ciudad de David al Monte del Templo.
Fue descubierto cerca de la piscina de Shiloaj durante una excavación en el sitio. El camino fue utilizado por las decenas de miles de personas que peregrinaban a Jerusalén para los Shalosh Regalim. Realizaban una inmersión en la piscina de Shiloaj antes de ingresar el Monte del Templo. El arqueólogo Eli Shikrun, quien encabezó la excavación, dijo que el camino demuestra la centralidad tanto del Beit Hamikdash como de la piscina en la vida de la ciudad en aquella época.
Los arqueólogos han descubierto el otro extremo del camino de 600 metros, cerca del Monte del Templo.
En la última excavación también se revelaron grandes piedras y rocas pertenecientes a la destrucción del Segundo Templo, cenizas y monedas del intento de rebelión de los judíos contra los romanos.
Estos últimos hallazgos en la Ciudad de David, justo afuera de los muros de la Ciudad Antigua, fueron hechos justo dos años después de que los arqueólogos encontraron la piscina de 2000 años de antigüedad, mientras la municipalidad estaba realizando trabajos para instalar un nuevo sistema de cloacas.
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