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Estudio De población judía en la Ciudad de Buenos Aires y 24 Partidos del Gran Buenos Aires
El Joint informó, durante una conferencia de prensa, a los medios comunitarios el resultado de un trabajo que realizaron durante fines del 2003 y el 2004, destinado a averiguar cuantos judíos viven en la Ciudad de Buenos Aires y 24 Partidos del Gran Buenos Aires, cuya población total es cercana a los 13.000.000 de habitantes.
El Director del Joint para América Latina, licenciado Alejandro Klavniek, explicó que ante la inexistencia de estudios de investigación rigurosos y sistemáticos, fuera de algunos trabajos parciales, que permita a la dirigencia comunitaria y a los profesionales que trabajan en las instituciones judías saber cual es la cantidad de judíos que viven en la zona, sus características socio-económicas, sus niveles de educación general y judía, el grado de participación institucional, su forma de observancia religiosa y el reconocimiento de su identidad judía, el Joint encaró la realización de un estudio que diera respuesta a estos interrogantes.
El trabajo se efectuó utilizando técnicas de muestreo que permitieron elegir 30.000 hogares a fin de obtener resultados representativos, es decir información precisa y sin segos que permitan establecer los parámetros para el análisis de la población judía con un razonable nivel de confianza, que de acuerdo a lo informado el margen de error es de +/-1% en la primera etapa y de +/- 5,6% en la segunda, lo que establece un 95% de nivel de confianza.
Un problema que enfrentaron es a quien considerar judío. Lo resolvieron utilizando tres parámetros, 1) el halajico, madre o abuela materna judía; 2) el utilizado por la Ley del Retorno, que incluye a los hijos de padre judío o nietos de abuelos paternos judíos; 3) el de autodefinición, es decir el que se considera judío.
Según explicó el licenciado Klavniek, cuando se publique el resultado del trabajo, tarea que realizará la AMIA, los diversos datos estarán desagregados de acuerdo a cada uno de los tres parámetros utilizados para definir quien es judío.
El estudio se efectuó en dos momentos o etapas, el primero intentó identificar los hogares judíos del total elegido, mediante una entrevista corta y para la segunda seleccionó una muestra de 316 personas consideradas judías del total de las identificadas como tales.
Del total de hogares elegidos se entrevistaron 29.939, obteniéndose información sobre un total de 109.100, identificándose 967 hogares judíos obteniéndose información sobre 2045 personas consideradas judías y 585 no judías que conviven en esos hogares.
En base a los resultados obtenidos consideran que en la zona estudiada viven 244.000 distribuidos, de los cuales el 67% se autodefine como judío total o parcialmente, de acuerdo al siguiente detalle:
1) nacido de padre y madre judíos 62%, de los cuales se reconocen como judíos el 94%;
2) nacido de madre judía 15 %, de los cuales se reconocen como judíos el 33%; 3) abuela judía 7 %, de los cuales se reconocen como judíos el 29%;
4) nacido de padre judío 10%, de los cuales se reconocen como judíos el 39%; 5) otro abuelo judío 12 %, de los cuales se reconocen como judíos el 17%;
6) sin ascendientes judíos 4%, de los cuales se reconocen como judíos el 98%.
Con respecto al tipo de matrimonio los datos aportados es que entre los definidos como judíos el 57% está constituido por dos personas consideradas judías, mientras que tomando en cuenta la cifra de 244.000, este tipo de matrimonios sólo alcanza el 40%.
Con respecto a los vínculos con las organizaciones judías, entre los identificados asistían al momento de la entrevista un 39%, un 38% lo había hecho con anterioridad y un 23% nunca lo hizo, siendo también muy interesante el dato de que de ese 39% que si concurre, el 64% lo hace a una institución socio deportiva, aunque también podían asistir a otras, debido a que nos aclararon que esta pregunta no era cerrada.
LA VOZ JUDIA, debido a su convicción de que sólo se puede considerar judío al que así es definido por la Halaja, considera que este trabajo es sumamente ilustrativo de cómo se ha perdido la identidad judía entre los judíos que viven en la Capital Federal y el primer cordón del Gran Buenos Aires.
Si bien es cierto que en base a las cifras brindadas por el Joint en la conferencia de prensa y al material que se nos suministró es muy difícil analizar este trabajo demográfico, hemos realizado algunos cálculos, que brindamos a continuación:
En primer lugar obtuvimos la cantidad de judíos de acuerdo a la Halaja: el 74 % del total de 244.000, es decir 180.560, personas distribuidos de la siguiente manera:
1)Nacido de madre y padre judíos 126.880, de los cuales se reconocen como judíos 119.270.
2)Nacido de madre judía 36.600, de los cuales se reconocen como judíos 12.080.
3)Abuela materna judía, 17.080 de los cuales se reconocen como judíos 4.950.
En segundo lugar sumamos la cantidad que se reconoce como judía, obteniendo que son 136.300 personas, es decir el 75,5% del total.
Luego tratamos de averiguar cuantas eran las que estaban o estuvieron relacionada con instituciones judías, siendo estos los resultados:
De las 136.300 personas que se identifican como judías, el 39% asistía al momento del estudio a varias o a una, es decir 53.160, de las cuales el 64%, 34.020 personas, lo hacía a una institución sociodeportiva, a la vez que 51.800 con anterioridad habían asistido a alguna a uno o a varias.
La pregunta que surge ante estas cifras, que muchos intuían, es que ha de hacer la dirigencia comunitaria para revertir el proceso asimilatorio, pues es sabido que el judío que se aleja de las instituciones judías profundiza su transito en la senda de la asimilación.
Cuando analizamos la manera que desde lo que debería ser el centro de la vida judía, la AMIA, se está trabajando en áreas como la educación y la cultura judía, el panorama se nos presenta mucho más negro que el que brindan estas cifras, pues no observamos la preocupación de difundir los ancestrales valores judíos ni la tradicional forma de vida que nos caracterizo durante siglos regidas por la Tora, sino todo lo contrario.
Vemos que en lugar de apoyar a las yeshivot y las escuelas judías observantes se promueven cursos en sociedad con instituciones reformistas que plantean lisa y llanamente el abandono de la Halaja. Qué lo importante es organizar actividades culturales idénticas a las que pueden realizar los clubes y espectáculos que compiten con los que ofrecen los teatros y cines justificándolas que son un medio para que los judíos se acercan a la AMIA, sin darse cuenta que al no brindarles nada que refuerce su identidad evitan la asimilación.
Saber cuánto somos es importante, y por eso valoramos el trabajo realizado por el Joint y esperamos ansiosos la publicación de su informe, pero mucho más utilizar los datos que aporta para combatir este flagelo que nos azota desde hace más de medio siglo y que de acuerdo a lo explicado por el licenciado Klavniek, se acentúa a partir de la sexta década del siglo XX, el momento en que las corrientes reformistas comienzan a captar instituciones en las cuales en lugar de tratar de evitar los matrimonios mixtos, se los “blanquea”.
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