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El Coronel Gal Hirsch es relativamente nuevo en la base central de entrenamientos, y ya está forzando algunos decretos vengativos. Les explicó a sus allegados, “encontré el lugar helado y sucio; hace falta implementar grandes cambios.” ¿Dónde decidió empezar? En la forma de vida judía.
Su primer orden, que sus propios oficiales denominaron “draconiana”, dice: “No habrá lugar para rezar en el ejército.” En otras palabras, si hasta ahora, los soldados recibían media hora cada mañana para rezar Shajarit, esto ya no existirá más. Hirsch ha quitado el Shajrit del programa, diciendo que recen en su tiempo libre.
Durante años, las reglamentaciones del ejército permitieron que los soldados recen durante la mañana. Hirsch ahora los está obligando a estar presentes y participar de todas las tareas matutinas. ¿Quieren rezar? Que se levanten más temprano, y para los que no lo saben, esto significa levantarse a las 5 de la mañana. Pero depende de la época del año, a veces esto es demasiado temprano. Y bueno, dice Hirsch. Que recen más tarde, pero en su tiempo libre.
El único otro momento que tiene un soldado para si mismo es durante el desayuno. Es verdad. En el estado de Israel, los oficiales religiosos (que representan el 50 por ciento de los soldados), no desayunan para poder rezar.
Por qué no hablan, uno se preguntará. La razón es que para estos soldados se toma en cuenta el comportamiento para la graduación final y la asignación de posiciones preferidas. Nadie quiere quejarse por miedo a las consecuencias.
Un capelán del ejército que apeló a Hirsch en nombre de un grupo de soldados que tenían miedo de identificarse, recibió la siguiente respuesta: “La tefila no debe ser tan importante para Usted si no quiere despertarse más temprano y rezar en su tiempo libre. Ha fallado en su jinuj.”
Si alguien falló en su jinuj es el ejército israelí – por nombrar un comandante así y no echarlo por abusarse de los soldados.
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