Mohammad Soleimani, un taekwondista iraní, ha renunciado a luchar por la medalla de oro al saber que su rival en la final sería un israelí , en los Juegos Olímpicos de la Juventud.
“Sí, estamos al tanto, vamos a analizarlo”, dijo Thomas Bach, vicepresidente del Comité Olímpico Internacional (COI).
La razón oficial para la ausencia de Soleimani fue una lesión, pero el haberle regalado el oro al israelí Gili Haimovitz se explica por razones políticas.
No es la primera vez que deportistas de Irán, que no reconoce la existencia de Israel como Estado, evitan competir con israelíes.
Sucedió ya en los Juegos de Pekín 2008 con el nadador Mohammad Alirezaei en una fase eliminatoria porque en la misma manga competía el israelí Tom Beeri.
Cuatro años antes, en Atenas 2004, el por entonces campeón mundial de judo Arash Miresmaeili regresó a su hogar sin haber competido porque en la primera ronda le tocaba enfrentarse al israelí Ehud Vaks. Para evitar sanciones se presentó a la ceremonia de pesaje con dos kilos sobre el límite permitido.
Bach estaba molesto con lo sucedido, porque cree que ni los Juegos tradicionales ni los juveniles deben ser utilizados para escenificar diferencias políticas.
“Más aún en Singapur, porque se estaría utilizando a menores de edad para cuestiones políticas”, dijo el alemán, oro en esgrima en Montreal 76.
Soleimani fue trasladado en una ambulancia al hospital para ser atendido de la supuesta lesión.
Daniel Oren, jefe de la delegación israelí, dijo alegrarse de la primera medalla de oro de su equipo, pero se mostró desilusionado porque no haya llegado en combate.
“Sabíamos que el iraní llegaría a la final, pero también que no la disputaría. Ese es su sistema. Tenemos la medalla, pero nos habría gustado ganarla compitiendo”.
Haimovitz, de 17 años, dijo no querer saber “nada de política o algo parecido”, y celebró su oro. “Yo estaba listo para el combate. Si se presentaba o no, no me importó”.
Alex Giladi, miembro israelí del COI que entregó las medallas en el taekwondo, está convencido de que la lesión fue una maniobra iraní para evitar quebrar las reglas olímpicas y desatar un escándalo.
“Incluso si estaba lesionado debió presentarse en el podio, escuchar el himno israelí y ver la bandera iraní por debajo de la de Israel. Es por eso por lo que lo metieron en una ambulancia, para evitar una crisis y posteriores sanciones”.
Irán suspendió sus contactos deportivos con Israel desde la Revolución Islámica de 1979, aunque Mohammed Malekabadi, dirigente de la delegación iraní, aseguró que Soleimani estaba lesionado. “Llegó a Singapur ya con una lesión. Pese a ello intentó competir y llegó a la final”.
Serv.de Prensa
|
|
|
|
|
|