El derecho a la resistencia contra la opresión, la ocupación y la agresión militar es reconocido por la Declaración Universal de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas. También está confirmado en el Acuerdo de Taif.
Hezbollah se ha ungido a sí mismo como la “Resistencia” y se otorga unilateralmente a sí mismo el derecho de armarse con el pretexto de que Israel está ocupando aún partes del territorio del Líbano y sigue violando su espacio aéreo.
Por lo tanto, si la ocupación extranjera y la violación de la integridad de las fronteras justifica el derecho a portar armas, a organizarse en un movimiento de resistencia armada y a tener el derecho a decidir sin tener en cuenta a nadie cómo, cuándo y dónde se debe hacer uso de estas armas; por la misma lógica, otros grupos pueden o deben organizarse en “resistencias” para defender al Líbano de los ataques del régimen de Bashar al-Assad. Más aún, tal vez sean necesarias organizaciones de resistencia para liberar al Líbano de la ocupación iraní.
Porque en verdad, el Líbano está bajo la ocupación iraní. La doctrina de Hezbollah y las declaraciones de sus líderes identifican al partido como parte de la “Nación” en lugar del Líbano. Además, Hezbollah no oculta el hecho de que es una parte integral de la Guardia Revolucionaria de Irán. Más aún, el partido está financiado y armado por Irán, y de manera inequívoca y sin vergüenza proclama que recibe órdenes del Líder Supremo de Irán de la Revolución Islámica. Por otra parte, el Estado libanés no tiene libre acceso a la zona ocupada por la miliciairaní, y la fuerza aérea libanesa tiene prohibido sobrevolar el área bajo la amenaza de ser derribada. Hezbollah no actúa como una entidad libanesa, sino como una milicia iraní integrada por ciudadanos libaneses.
En consecuencia, considerando la ocupación iraní de parte del Líbano y los ataques del ejército de Bashar al-Assad, y en base a la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el Acuerdo de Taif y las declaraciones ministeriales ratificadas por todos los partidos del parlamento que ponen al Ejército y a la Resistencia en el mismo nivel que al pueblo libanés, todos los libaneses - o grupos libaneses - tiene el derecho a formar su propia “resistencia”, para portar armas y decidir cómo y cuándo utilizar estas armas para defender al Líbano. Hezbollah no es la Resistencia, en el mejor de los casos puede ser “una” resistencia o la “Resistencia Islámica”, pero de manera más realista debería ser designado de “ex-resistencia”, ya que ha dejado de actuar en tal calidad desde que el ejército israelí abandonó el Líbano.
En lo que respecta a la ocupación de un país y frente a la agresión militar, no puede haber una doble moral. A amenazas similares corresponden respuestas similares. Sin embargo, dado el peligro asociado con la proliferación de los movimientos de resistencia, sería mejor para que el ejército defienda eficazmente todas las fronteras contra toda agresión, para que las Fuerzas de Seguridad Interna se hagan cargo en forma efectiva de la seguridad en todo el territorio libanés, la milicia iraní, Hezbollah, debe ser desarmada y la zona que está ocupando deber regresar a la soberanía del Líbano.
Nowlebanon.com
|
|
|
|
|
|