Mientras el coro habitual se empeña en repetir la cantinela de que Israel es un Estado cuya economía artificial no podría aguantar sin millones de dólares procedentes de Estados Unidos, estamos a punto de asistir a un hecho que puede dar un vuelco dramático a la situación de Israel en su entorno y a sus relaciones con Europa.
Y es que la democracia israelí va a pasar de ser una importadora de energía a ser exportadora neta. Y sin recurrir a lo nuclear ni a nada situado en Cisjordania para frustración de la industria de la paz.
La combinación del descubrimiento de yacimientos de gas submarinos y explotables con la transformación de la industria del carbón al gas propio ya ha permitido, por ejemplo, que al Gobierno de Jerusalén ya no lo preocupen los constantes sabotajes al suministro de gas procedente de Egipto.
De hecho Israel ha dejado de necesitarlo. Es más, ha abaratado en un 11% el costo de producción de energía eléctrica lo que supone un ahorro de 55.000 millones de dólares. Más o menos la mitad de lo que va a costar el rescate a Portugal.
Pero la importancia estratégica del asunto es que gracias a los tratados de explotación firmados con Chipre y a las plantas de transformación de hidrocarburos proyectadas en Grecia el gas israelí puede convertirse a corto plazo en el sustituto perfecto del gas procedente del Magreb cuya estabilidad ahora mismo es nula.
Y con un Israel garante del suministro energético de Europa vamos a ver, por ejemplo, si algunos gobiernos siguen financiando generosamente las actividades políticas de algunos de sus espabilados ciudadanos contra la existencia del mismo Israel.
Y hasta es posible que el Rey de España acuda a recibir al pie del avión al presidente de Israel como ha hecho con el emir de Qatar. Al fin y al cabo al presidente de Israel lo nombra un parlamento democráticamente elegido, mientras al qatarí lo ponen el dedo y la santa voluntad del sátrapa de turno.
No es extraño que mientras las agencias de calificación internacionales amenacen con rebajar el rating de Estados Unidos se lo suban a Israel. Qué jodida es la realidad.
...colabora con nuestra tarea de difusión, haciendo circular entre tus listados de correo, esta noticias...gracias Israel.
D S
|
|
|
|
|
|