Los jueces que llevan adelante el juicio por irregularidades en la investigación del atentado a la AMIA recibieron a los peritos que evaluaron al imputado por encubrimiento Hugo Anzorreguy, ex jefe de la SIDE menemista.
Ocurrió ayer ante el pedido de Anzorreguy de ser excluido del juicio oral y público que comenzó en agosto de 2015, por no estar en condiciones físicas y psíquicas para enfrentarlo.
En la audiencia estuvieron presentes los peritos oficiales del Cuerpo Médico Forense y los ofrecidos por la defensa del imputado y las querellas de familiares de las víctimas, quienes dieron cuenta ante el Tribunal Oral Federal 2, en líneas generales y con algunas discrepancias, que Anzorreguy está en condiciones de continuar en el proceso judicial e incluso hacerse presente en la sala de audiencias con asistencia médica, por su patología cardíaca.
Los peritos ofrecidos por los familiares querellantes señalaron que el ex jefe de la SIDE presenta un deterioro propio de su edad y “depresión reactiva”, producto de estar sometido a un juicio como este. Lo que prueba, justamente, que el imputado es consciente y comprende lo que está ocurriendo y por consiguiente está apto para atravesarlo.
Particularmente, los profesionales propuestos por Memoria Activa argumentaron, con la cita de diversos ejemplos, que durante la evaluación hubo una “simulación” por parte de Anzorreguy, congruente -explicaron- con un estímulo externo: salvarse del juicio.
De manera similar, el neurólogo oficial señaló la existencia de un “leve deterioro cognitivo” y un “componente facticio”, es decir, la “fabricación de una situación” por parte del examinado, que condiciona el diagnóstico.
Los únicos que no estuvieron de acuerdo con la mayoría fueron los peritos ofrecidos por la defensa de Anzorreguy y el psiquiatra oficial, quien llevó al peritaje un informe escrito previamente y no lo evaluó frente al resto, como había ordenado el tribunal.
Según explicó, ya había analizado al imputado previamente para otros expedientes y esa fue la razón por la que no consideró necesario volver a hacerlo para este caso. Sin embargo, lo descrito en su informe dista mucho de lo que el resto de sus colegas observaron.
Para sumar credibilidad, una de las peritos ofrecida por la querella de Apemia le recordó a los jueces que no tuvo inconveniente en declarar inimputable al genocida Emilio Massera, más allá de lo que ello implicaba.
Los jueces Gorini, Perilli y Costabel tendrán, según anticiparon, una resolución para la próxima audiencia del juicio, este jueves 12 de octubre.
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