El Bloque Unido Religioso (ortodoxo) se hizo de la presidencia de la AMIA. Obtuvo alrededor del 35% de los votos en la elección de delegados, con lo cual constituyó la primera minoría. El nuevo presidente será el empresario Guillermo Borger, a quien secundará como vice primero Angel Barman, también miembro de la corriente más ortodoxa. La victoria de la corriente «raigal» (como se autodenominan) fue posible porque la lista «AMIA es de todos», que orienta el rabino Sergio Bergman y que obtuvo el tercer lugar en los comicios de hace un mes, apoyó a la primera minoría. Bergman y los rabinos de la corriente «conservadora» (progresista-reformista) mantuvieron una durísima disputa desde sus púlpitos con sus colegas ortodoxos, por una serie de cuestiones que parecían insuperables, pero en política todo es posible
La lista de Bergman se quedó con la vicepresidencia segunda de la AMIA, cargo que ocupará el dirigente José Scaliter, ex presidente de Hebraica. Por su parte, el Frente que llevó como candidato a Abraham Kaúl -apoyado por el partido Avodá (laborista) que históricamente dominó la política comunitaria- tendrá la secretaría general, en manos del Dr. Julio Schlosser, proveniente de la comunidad Bnei Tikvá de Belgrano. Otro cargo clave, la tesorería, irá a manos de Beny Zucman, un joven dirigente ortodoxo. El Bloque Unido Religioso, que logró aglutinar a varios partidos de esa orientación y que tuvo el apoyo de fuertes empresarios que lograron la afiliación de casi 2.000 nuevos socios de AMIA en los pasados tres años (período que dura la presidencia), no cuenta con mujeres en sus listas, y además al menos 50% de sus candidatos son judíos sefaradíes, quienes genealmente son también socios de A.I.S.A, la mutual que los aglutina y representa desde hace años. En los días previos a la asamblea, el argumento que esgrimía la gente cercana a Bergman era que no apoyarían su postulación por su cercanía con el gobierno nacional, pero también muchos electores pasaban antiguas facturas por promesas no cumplidas (según ellos) por Kaúl en su anterior presidencia. Por ello, el bloque religioso ortodoxo habría solicitado la renuncia a la candidatura de Kaúl y de otro dirigente del frente, Mario Sobol. Ante la negativa de ambos, a los ortodoxos no les quedaba otra opción (para obtener la mayoría absoluta) que aliarse a quien fuera su enemigo acérrimo de siempre, el rabino Sergio Bergman.
Quizás lo que evaluaron algunos electores indecisos fue que para lo más alto de la nueva C.D. fueran nominados judíos ortodoxos de activo ideario sionista, cosa que no ocurre con otros grupos religiosos que conforman el bloque triunfador,
El nuevo presidente de AMIA, quien asumirá el cargo el 12 de junio próximo, prometió, según AJN, «gobernar para todos, con la inclusión de todos los judíos de la Argentina, sin distinción de ideologías, creencias religiosas o preferencias políticas».
Cabe recordar que AMIA renueva autoridades cada tres años, lo que supone una responsabilidad mayúscula, para que en ese período se pueda cumplir con las expectativas de la masa societaria.
La ayuda social deberá ser distribuida equitativamente entre los distintos grupos que componen la comunidad judía de Argentina, y el tema más caliente (el de los entierros en cementerios comunitarios de conversos al judaísmo) deberá ser tratado con altura e inteligencia para no deshonrar a los fallecidos o a sus familiares
Las comunidades del interior del país, que luchan arduamente contra la asimilación de sus miembros, deberán ser apoyadas de hecho por la entidad central, así como los niños judíos deberán ser aceptados en las escuelas bajo cualquier situación, ya sea económica, familiar etc.Y ya que hablamos de educación, habrá que poner énfasis en ella, reabrir la biblioteca que otrora fuese orgullo del pueblo del libro y también, acompañar a nuestros ancianos para que puedan tener una vejez digna, con alimentación, abrigo y vivienda para todos, no sólo para aquellos que puedan abonar cifras inalcanzables para pasar sus últimos años-
En sus primeras declaraciones, Borger dijo a AJN que buscará mantener un diálogo fluido con el gobierno de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y conceder la representación política de la comunidad a la DAIA.
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