Los dichos de Stiuso acerca de que nunca conoció a Néstor Kirchner le tapan la boca a quienes se la pasaron cacareando que había sido el ex presidente quien lo había elegido para investigar el atentado a la AMIA. En cambio le dan la razón a lo afirmado en Caso Nisman: Secretos inconfesables acerca de que era un cuento chino que Kirchner y Nisman hubieran sido presentados por el entonces Presidente, ya que ambos se conocían desde muchos años atrás, cuando Nisman trabajaba en un juzgado de Morón y Stiuso vivía en Ramos Mejía. También se afirma en el libro (ver después del despacho de Télam) que Kirchner dejó su nombramiento en manos de la colectividad judía, y que incluso al polemizar con aquella públicamente lo llamó “Dickman”, lo que indica que ni siquiera retenía su nombre.
“Jaime” dice que no conoció a Néstor Kirchner y que la única vez que estuvo con CFK, en la Comisión Bicameral de Seguimiento de las Investigaciones de los Atentados, ambos discutieron con acidez (porque Cristina se negaba a tragar sus embustes) se pelearon en público. La admisión tiene aún más valor viniendo de quien en la actualidad (como cuando estaba al frente de la disuelta SIDE) está estrechamente asociado con empresarios vinculados a los servicios de inteligencia israelíes. Que son los que impulsaron a Nisman a interrumpir su periplo europeo y regresar en medio de la feria judicial de enero a lanzar su bomba.
En Página/12 Irina Hauser me recuerda que el que lanzó el globo de que había sido Kirchner el que le había presentado a Stiuso fue el propio Nisman: “Lo conozco (a Stiuso) de la época del juicio oral. Cuando me van a buscar para ponerme en la Unidad de la AMIA. Néstor Kirchner dice que en la SIDE me iban a ayudar y se iban a encargar a todo. Me lo presentó a Stiuso y me dijo ‘Esta persona te va a dar una mano’” macaneó Nisman a la revista Noticias en enero de 2015, unos días antes de su muerte.
Los dejo con el despacho de Télam:
Stiuso afirmó que Cristina cambió “radicalmente” su postura sobre AMIA tras la muerte de Néstor Kirchner.
El ex director de Operaciones de la ex SIDE Antonio “Jaime” Stiuso afirmó que nunca conoció al ex presidente Néstor Kirchner y que su esposa, la ex mandataria Cristina Fernández, “cambió radicalmente” su postura sobre la responsabilidad de Irán en el atentado a la AMIA luego de la muerte de su marido en octubre de 2010.
“Luego del fallecimiento de su esposo, el ex presidente Kirchner, ocurrido en el mes de octubre del año 2010, la Presidenta cambió radicalmente de rumbo respecto del tema iraní”, declaró Stiuso en la causa que investiga la muerte del fiscal federal Alberto Nisman.
La declaración se concretó ante la ahora ex jueza de la causa, Fabiana Palmaghini, ya que ahora la pesquisa está a cargo del juez federal Julián Ercolini.
Stiuso declaró como testigo ante Palmaghini el 29 de febrero último.
Según informaron fuentes judiciales, Stiuso dijo en esa declaración tomada como testigo y bajo juramento de verdad, que nunca conoció al ex presidente Néstor Kirchner y negó que el ex mandatario lo hubiese presentado con Nisman, como sostenía el ex fiscal de la causa AMIA.
“No es cierto todo cuanto se dijo acerca de que Kirchner me haya presentado a Nisman, aclarándole a éste que debía trabajar ‘para mí’ o algo similar. Ese relato forma parte de una de las tantas fábulas que se han creado respecto de mi persona”, expresó Stiuso en su declaración.
Y agregó que al principio la ex presidenta avaló la dirección dada a la pesquisa desde la SIDE con él a cargo y en la Unidad Amia, orientada a la responsabilidad de Irán en el ataque terrorista del 18 de julio de 1994 que causó 85 muertos en Pasteur 633.
Pero “la presidenta cambió radicalmente de rumbo respecto del tema iraní”, luego de la muerte de su marido, declaró Stiuso.
“Es importante aclarar que nunca tuve trato personal con el doctor Kirchner. Nunca tuve una reunión o encuentro con él”, afirmó ante la jueza.
Y dijo que a Cristina la vio una sola vez en su vida. “En el año 2001, en oportunidad de una reunión de la Comisión Bicameral de Seguimiento del atentado a la AMIA que ella integraba como diputada”. En esa reunión ambos discutieron y ella se fue antes de su finalización.
“Ni ella ni yo podemos olvidarnos, ya que discutimos acaloradamente frente a todos para luego levantarse y abandonar la reunión. Como dije antes, al doctor Kirchner no tuve oportunidad de conocerlo”, reiteró según su declaración difundida por fuentes del caso.
La causa por la muerte del fiscal Nisman llegó al fuero federal la semana pasada, luego que la Cámara en lo Criminal rechazó una apelación contra esta decisión del único imputado, el técnico informático Diego Lagomarsino.
Los más de 60 expedientes fueron trasladados desde el Palacio de Justicia al edificio de Comodoro Py 2002 y Ercolini ordenó resguardarlos en una oficina de su juzgado, a la que se le cambió la cerradura.
El magistrado estudiará la causa y luego resolverá si acepta la competencia o decide que debe ser investigada por otro magistrado, Luis Rodríguez, quien lleva una causa anterior por amenazas a Nisman y a su familia.
Para ello Ercolini pidió a Rodríguez que le envíe los últimos cuerpos de la causa para analizarlos.
Fragmento de “Caso Nisman: Secretos inconfesables”:
Contando con experiencia en juicios orales, Nisman había llegado en calidad de refuerzo del ministerio público para tan importante ocasión: el juicio de la AMIA fue el proceso penal más largo y complejo de la historia nacional, por encima del histórico juicio a los comandantes de las juntas militares del período 1976-1982. El procurador general Nicolás Becerra diría que había nombrado a Nisman en atención a “su gran probidad, conocimiento y capacidad de trabajo” ocultando que su nombramiento le había sido pedido por Rogelio Cichowolski, quien había sido el primer abogado de la DAIA tras el atentado (18 de julio de 1994, 85 muertos y unos doscientos heridos de consideración) de la que era entonces presidente el banquero Rubén Beraja. Cichowolsky había luego sucedido a Beraja en la presidencia de esa entidad, creada para combatir el fascismo y el racismo, pero que con los años había ido convirtiéndose en el apéndice político de la Embajada de un estado de Israel crecientemente racista. Embajada que había refrendado el pedido de Cichowolski.
Sólo después de obtenida la aprobación de Becerra, los fiscales Mullen y Barbaccia le comunicaron a Nisman la buena nueva en el curso de la fiesta de matrimonio entre , hijo de Jorge, uno de los jueces que en 1985 condenaron a las Juntas Militares.
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