Uno de cada diez diputados reconoce que es millonario
Por primera vez se hacen públicas sus declaraciones
En cada sesión de la Cámara de Diputados conviven, sin distinción de partido ni distrito, legisladores varias veces millonarios y otros que no tienen casa ni auto ni nada. Al menos así surge del análisis de las declaraciones juradas patrimoniales que presentan todos los años, en este caso correspondientes a 2005. Uno de cada cuatro diputados juró en esos documentos que no tiene ni un peso en el banco. De ellos, más de la mitad dijo que tampoco posee dinero en efectivo; es decir que uno de cada ocho diputados, el 13 por ciento, aseguró no tener ningún ahorro. En la otra punta, 26 legisladores, uno de cada diez, admitieron que son millonarios; esto es, que tienen bienes por más de un millón de pesos.
En el escalón más alto de la pirámide se ubica el empresario Francisco de Narváez, con un patrimonio de 28.709.880 pesos, seguido de cerca por Mauricio Macri, con 25.220.556 pesos. En los más bajos están el macrista Luis Galvalisi, con varias deudas bancarias que lo dejan con un saldo negativo de 27.581 pesos, y la santafecina María del Carmen Alarcón –se alejó del PJ por la política agraria del oficialismo–, que sólo declaró una casa por 80.000 pesos y una deuda hipotecaria por el mismo monto. Para calcular los patrimonios, LA NACION sumó los bienes declarados por los diputados (y por sus cónyuges e hijos menores), agregó las acreencias y restó las deudas.
Si bien los legisladores declaran su patrimonio desde hace varios años, en cumplimietno de la ley de ética pública (sancionada en 1999), ésta es la primera vez que las autoridades de la Cámara aceptan entregar copias de todas las declaraciones juradas.
Fue ante un pedido que LA NACION presentó en agosto pasado y que la Secretaría Administrativa respondió a fines de diciembre, luego de que lo autorizó el presidente de la Cámara, Alberto Balestrini.
Se entregaron 239 de los 256 diputados en actividad. Con un patrimonio de 1.097.978 pesos (cuatro inmuebles, una pick-up y participación en dos empresas por 506.877), Balestrini es uno de los que dijeron no tener plata en el banco.
En cambio, declaró 271.150 pesos en efectivo. En la lista de los que aseguraron que no tienen depósitos bancarios ni dinero en efectivo, en total 30, figuran: María del Carmen Rico, hija del ex líder carapintada Aldo Rico; Juan Carlos Gioja, hermano del gobernador de San Juan, José Luis Gioja; el arista Carlos Raimundi, y el macrista Federico Pinedo. En el grupo hay un caso llamativo: el del kirchnerista Jorge Giorgetti (Santa Fe), que, con bienes por 7.391.731 pesos, es el tercero más rico de la Cámara. El diputado dijo que es dueño de 20 propiedades inmuebles (entre ellas, 8 casas y 4 departamentos, en Santa Fe y la Capital), un auto, una pick-up, un velero y 370 cabezas de Ganado. La composición del patrimonio de Narváez es bien distinta. Su fortuna se basa, antes que nada, en las 23 empresas en las que tiene participación por Entre ellas, figuran Citrícola Ayui SA, dedicada a la producción de cítricos, y Las Blondas SA, dueña de la marca de ropa femenina Rapsodia. El diputado del bloque Justicialista Nacional tiene créditos por 8.792.037, deudas por 35.221.971 y depósitos bancarios y efectivo por 2.440.489 pesos. A contramano de su fortuna, Narváez declaró una sola casa, en el Tortugas Country Club, y ningún auto.
Aunque consignó tres propiedades inmuebles, Macri también dijo que tiene una sola casa, situada en Barrio Parque y valuada en 2.995.669 pesos. Eso sí, consignó tres autos (dos Peugeot y una Suzuki Vitara), y ahorros por 5.822.176 pesos. Una gran parte del patrimonio del presidente de Boca, 9.888.557 pesos, es su participación en Socma, el grupo de empresas que maneja su padre, Franco Macri. El diputado también tiene participación en Yuto S.A., una compañía agroindustrial y en la Urbanizadora La Matanza. El cuarto más acaudalado es Carlos Ruckauf, hoy en el oficialista Peronismo Federal, que declaró bienes por 3.373.181 pesos. Dijo que él y su esposa, la jueza María Isabel Zapatero, son dueños de un departamento en Florida, Estados Unidos, valuado en 630.000 dólares. Consignó además dos autos, depósitos bancarios y dinero en efectivo por 528.918 pesos y aseguró que es propietario de "Consuelo", una pintura de Antonio Berni. (POBRE, APENAS $ 10 MILLONES ¿?) Dueño de un patrimonio de 2.563.176, otro de los que más bienes declaró es Guillermo Alchouron, de Acción por la República.
En su declaración consignó ocho bienes inmuebles, dos autos, una empresa agropecuaria y ahorros por 182.000 pesos.
Barrionuevo
También entre los que superan el millón de pesos de patrimonio se ubican Luis Barrionuevo y su esposa, Graciela Camaño. Ambos declaran bienes por alrededor de 1.700.000 pesos, en una gran parte formado por la empresa Bellota SA, propiedad de Camaño, y por seis inmuebles (en San Martín, Catamarca, Capital, Pilar y Mar del Plata) que suman 616.539. Los documentos presentan, sin embargo, algunos desajustes. El dijo que su esposa tenía dinero en efectivo por 188.000. Pero ella sólo declaró 72.565. Entre los menos afortunados, Galvalisi dijo que no tiene casa ni auto ni participación en empresas. El diputado por la Capital juró que sus únicos bienes son depósitos bancarios y dinero en efectivo por 23.319 pesos y aseguró que tiene deudas por 50.900. Al igual que Alarcón, quedaron en cero dos tucumanos: Herrera dejó en blanco todos los casilleros. La quinta que menos declaró es Elisa Carrió, con un patrimonio de 3709. La líder de ARI dijo que tiene: un departamento en Capital y dos terrenos en el interior, por 62.395; bienes del hogar por 22.246, y ahorros por 8.035. Pero las deudas, por 89.067, casi la dejan en cero. (Y DEL ESFUERZO POR RECIBIR "LA BONIFICACION" POR CALLARSE DEL TEMA IBM-BANCO NACION, nada ¿?)
Por Gabriel Sued
De la Redacción de LA NACION
Domingo 4 de febrero de 2007
Deudas hipotecarias
Un gran porcentaje de diputados logró superar la dificultad que representa acceder a un crédito en la Argentina: uno de cada cuatro, el 26 por ciento, compró o arregló su casa a partir de un préstamo bancario y hoy carga con una deuda hipotecaria. Entre los que acudieron a este tipo de operaciones figuran: Juan Carlos Gioja (San Juan), Roberto Iglesias (Mendoza), Juan Manuel Urtubey (Salta), Federico Storani (Buenos Aires), Carlos Snopek (Jujuy), Cristian Ritondo (Capital), Marta Maffei (Buenos Aires), Rafael Bielsa (Capital), Miguel Bonasso (Capital), Elisa Carrió (Capital) y Hugo Franco (Buenos Aires).
Nadie investiga posibles casos de enriquecimiento. Las autoridades legislativas no aplican mecanismos de control
A diferencia de lo que ocurre desde hace siete años en el Poder Ejecutivo, en la Cámara de Diputados nadie se encarga de analizar los datos consignados por los diputados en sus declaraciones juradas patrimoniales con el fin de detectar incompatibilidades o casos de enriquecimiento ilícito. La Secretaría Administrativa de la Cámara baja, dirigida por Alberto Suárez, sólo se ocupa de reclamar a los legisladores la entrega de los documentos, de conservarlos durante diez años y de responder a eventuales pedidos de los ciudadanos. Sin embargo, cuando LA NACION hizo el pedido, faltaban las declaraciones juradas de 16 diputados: Josefina Abdala (Mendoza), Mario Bejarano (Formosa), José Brillo (Neuquén), Eduardo Camaño (Buenos Aires), Stella Maris Córdoba (Tucumán), Roberto Costa (Buenos Aires), Carlos Dellepiane (Buenos Aires), Daniel Gallo (Tierra del Fuego), Nancy González (Chubut), Jorge González (Santa Fe), Griselda Herrera (La Rioja), María Alicia Lemme (San Luis), Carlos Macchi (Corrientes), Hugo Martini (Capital), José Mongelo (Chaco) y Alberto Pérez (Neuquén).
La Secretaría Administrativa tampoco tiene facultades para pedir a los diputados aclaraciones ante datos o información confusa. (DE SEGURO SE LOS PERDONARAN SI VOTAN POR "EL K" ¿'). De acuerdo con la ley de ética pública, la tarea que hoy cumple le corresponde a la Comisión Nacional de Etica Pública, organismo que debía contar con representantes de los tres poderes del Estado, pero que nunca se creó. La consecuencia de esa falta de control es la disparidad e informalidad que rigen gran parte de las declaraciones de los diputados.
En el 10 por ciento de los documentos analizados por LA NACION, las carencias eran tan importantes, que fue imposible calcular la suma de los bienes.
Misterio conyugal
Es el caso de Beatriz Rojkes, esposa del gobernador de Tucumán, José Alperovich.
Pese a que la ley dice que las declaraciones deben contener "una nómina detallada de todos los bienes propios del declarante, propios de su cónyuge, los que integren la sociedad conyugal, los del conviviente, los que integren en su caso la sociedad de hecho y los de sus hijos menores, en el país o en el extranjero", la diputada puso que había decidido no consignar los bienes de su esposo. Tampoco pueden conocerse con certeza los patrimonios totales de Adrián Menem, sobrino del ex presidente Carlos Menem, ni del ultrakirchnerista Carlos Kunkel llenar, los dos cometieron la misma omisión: pusieron el valor de incorporación de sus propiedades inmuebles, pero no los valores actuales. Lo mismo hicieron Sergio Varisco, Eusebia Jerez, Jorge Landau, María Angélica Torrontegui y Lidia Naim, entre otros. Otros dos casos parecidos entre sí, en los que se hizo imposible calcular el patrimonio, son los del radical Oscar Aguad y del macrista Cristián Ritondo. Aguad entregó los datos sobre sus cuentas bancarias en un sobre aparte y Ritondo lo hizo en una nota adjunta. Ninguno de esos documentos fue entregado junto con sus declaraciones juradas, pese a que, de acuerdo con la ley, el monto de los depósitos bancarios debe figurar en la planilla de acceso público. El presidente del bloque del Frente para la Victoria, Agustín Rossi, tampoco se ajustó a lo que indican las planillas que completan los diputados.
En el casillero correspondiente al dinero en efectivo, remitió a una declaración de bienes personales que no se entregó junto con su declaración jurada. La disparidad llegó a tal punto que los legisladores no se pusieron de acuerdo sobre cuál es el sueldo que reciben por mes por su trabajo en la Cámara. Para tomar dos ejemplos de la Capital, Guillermo Alchouron dijo que cobraba 5.040,62 pesos, mientras que Mauricio Macri consignó 3.979,50. Ante la falta de criterios comunes, algunos legisladores revelaron información que debía quedar en reserva, como el domicilio particular o los números de sus cuentas bancarias.
Qué dice la ley Obligados
Según la ley de ética pública, los funcionarios de los tres poderes del Estado deben presentar su declaración jurada 30 días después de asumir y actualizar la información una vez al año.
Acceso
Cualquier persona tiene derecho a consultar y obtener una copia de esos documentos.
Trámite: Debe presentarse una nota en la que se detalle nombre, documento, domicilio y ocupación, el motivo y destino del pedido, y el reconocimiento de las restricciones en el uso de los datos.
Sanciones:
La no presentación de la declaración es considerada falta grave y da lugar a un castigo.
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