El Ministerio de Asuntos Religiosos y el gran rabino David Lau presentaron un programa de cuatro pasos para que el Estado normalice la certificación kosher. En dicha propuesta estuvieron presentes el ministro de Economía Naftali Bennett y el rabino Eli Ben Dahan junto con el Gran Rabino askenazí.
El líder de Habait Hayehudí, Naftali Bennet, junto al líder religioso Eli Ben Dahan, y al Gran Rabino askenazí David Lau, presentaron propuestas de reformas al sistema de certificación del los productos koshers. Las modificaciones incluyen varias medidas para normalizar el sistema actual.
"El problema principal es que el mashgiach, el que otorga el certificado de Kashrut, es empleado por el Mushgach , quien recibe el certificado kosher”, explicó Bennett, quien agregó que “se trata de un sistema que no funciona y que posee normas uniformes".Asimismo, el también ministro de Asuntos Religiosos comentó que la reforma consiste en un programa de cuatro pasos. El primer paso es separar el supervisor kosher de la empresa. "El supervisor del kashrut será empleado por una empresa independiente que se dedica a tal fin y no por la propia empresa", explicó.
Bennett también señaló que tres distintos niveles de certificación kosher se establecerán y serán regulados por el Estado. "El siguiente paso es establecer tres niveles de Kosher: Estándar, Mehadrin y Mehadrin Min Mehadrin. Esto permitirá a cada empresa elegir cuál es el nivel que quieren", agregó y dijo que “esto permitirá al consumidor elegir donde comen basado en el nivel en que se sienta cómodo".
El funcionario israelí señaló que el nuevo sistema erradicará la confusión sobre el estado de un determinado establecimiento. Además, aseguró que los certificados kosher “son bien visibles en los mostradores de restaurantes por ley pero a menudo puede ser difícil de determinar a simple vista si el certificado es auténtico, si se ha actualizado y si se emitió la certificación”. El rabino Eli Ben Dahan señaló que “las reformas se deben a la necesidad de reafirmar el estado de la función del Rabinato en las leyes kosher a los ojos de la opinión pública israelí”.
"El objetivo final de la revolución kosher es restaurar la confianza pública en el Rabinato, proporcionando una total transparencia y la actualización de la normativa, utilizando la mejor tecnología para determinar el estado kosher, terminando con los intereses extranjeros y estableciendo diferentes niveles de certificación kosher”.
La kashrut designa aquello correcto o apropiado para ser consumido y es la parte de los preceptos de la religión judía indica lo que se puede consumir y lo que no, basado en los preceptos bíblicos del Levítico 11. Tales reglas, interpretadas y expandidas a lo largo de los siglos, determinan con precisión qué alimentos se consideran puros, es decir, cuáles cumplen con los preceptos de la religión y cuáles no son kosher. La etiqueta kosher que reciben ciertos productos alimenticios indica que dichos productos respetan los preceptos de la religión judía, y que se consideran puros y aptos para ser ingeridos por los practicantes judíos. La Torá permite el consumo de los animales terrestres que tienen pezuñas hendidas y rumian.
El cerdo, la liebre, el tejón, el camello y varios animales más no cumplen ese requisito; por lo tanto, las reglas del kashrut establecen que no se deben consumir las carnes de estos animales. De los animales acuáticos, está permitido el consumo de los que tienen aletas y escamas. Por lo tanto el consumo de las langostas, camarones, ostras, cangrejos, tiburón y bagre está prohibido. En las aves, la distinción es menos clara: la Torá provee una lista explícita de aves impuras, sin explicar por qué lo son. Aunque la mayoría son aves de rapiña o carroñeras, de modo que las interpretaciones rabínicas suelen colocar todas las aves de presa y de carroña entre las "no kosher".
Entre los insectos, unos pocos están permitidos, como la langosta y el saltamontes, mientras que todo el resto de los insectos voladores están prohibidos.
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