No se equivoque, no es el problema de otros. Esta nota que está Ud. leyendo es una pequeña reseña de lo que está pasando con el Instituto Secundario de la Escuela Natan Gesang.
Hagamos juntos un pequeño ejercicio de memoria. ¿Recuerda Ud. cuántas instituciones educativas de la Red Escolar Judía cerraron sus puertas en curso de los últimos años? Lo vamos a ayudar:
Escuela Ana Frank de Avellaneda, Escuela Integral Rambam, Instituto Dr. Hertzl de la calle Tucumán, Escuela Bialik de Aguirre, Escuela Scholem Aleijem de Mataderos, Escuela Jerusalem, Seminario de AMIA, el Instituto Schejter, Escuela Hertzlía, Escuela de Formación de Morim (Mijlalá), Instituto de Formación de Docentes de Jardín de Infantes Agnón, Escuela Hebrea de Lanús, Ramat Shalom, Instituto Peretz, Escuela Secundaria Weitzman, Instituto Integral Amós, Escuela David Wolfsohn.
El jueves 25 de octubre la Comisión Directiva de la institución nos comunicó que el Instituto Secundario de la Escuela Natan Gesang cerraría sus puertas esgrimiendo argumentos "sociológicos" y "pedagógicos". Les queremos contar que la escuela es la única de la red escolar judía que tiene articulación con la universidad, donde los alumnos cursan en 4º y 5º año una jornada por semana en el ámbito universitario.
Sus alumnos tienen una carga horaria de 11 horas semanales de estudios judaicos, entre las más altas de la Red Escolar Judía. Tienen 6 horas semanales de inglés que los habilita al finalizar los estudios a rendir exámenes internacionales como el First Certificate. Que la escuela, en las épocas de crisis nacional, educó y mantuvo dentro de un marco social inclusivo a jóvenes en grave riesgo social dándoles un ámbito de pertenencia. La calidad de la educación que los chicos reciben por parte de docentes, intachables y absolutamente comprometidos con la educación de excelencia en todas sus áreas, les permite acceder a la universidad con total naturalidad y les otorga las herramientas para enfrentar con solvencia las diferentes carreras que deciden encarar. Prueba de ello son varias camadas de profesionales exitosos salidos de los alumnos que cursaron en esta institución. ¿Podría alguien explicarnos a la luz de estos hechos cuáles son la razones "pedagógicas" o "sociológicas" que esgrimen?
Las escuelas se construyen apostando al futuro. Lamentablemente, si se cierra esta escuela (¡otra más!) van a privar a nuestros hijos de esta educación y van a privarlos a todos ustedes de la posibilidad de que sus hijos o sus nietos gocen de este privilegio.
Nosotros nos preguntamos cómo puede ser que las diferentes instituciones y organizaciones judías no se horroricen ante la posibilidad de que un centro educativo al cual tienen el deber de preservar, administrar y hacer crecer para garantizar la continuidad de un pueblo y su sostén moral e intelectual, ¡¡¡CIERRE!!!
Llenos de tristeza, escuchamos argumentos tales como que el Instituto Secundario debe cerrar para que puedan seguir funcionando el Jardín de Infantes y la Escuela Primaria Natan Gesang. No lo escuchamos solamente de los directivos de la institución sino también de las altas instancias de la política comunitaria - AMIA y Vaad Hajinuj.
Esto fue expresado a los padres del Jardín, de la Escuela Primaria y del Templo Bet Jai haciendo responsable de las carencias que pudiesen tener en esas instancias de la institución a la existencia de la Escuela Secundaria.
El cierre del Instituto Secundario fue decidido en forma unilateral, sin consultar a los asociados de la institución y en forma totalmente anti estatutaria.
Docentes, padres y egresados han ofrecido a lo largo de los últimos años diferentes propuestas de ayuda en términos de difusión de la tarea de la escuela secundaria y recaudación de fondos, propuestas que han sido sistemáticamente ignorados o rechazadas.
Es una paradoja que los dirigentes comunitarios no se horroricen con otro cierre, sino que lo prohíjen y alienten considerando natural el cierre de una escuela.
Nosotros apelamos a la dirigencia comunitaria para que ayude a construir y a sumar y no a destruir y enfrentar. La función de los directivos de las instituciones es mantener todas las instancias educativas de la escuela. Esa es su misión.
Nosotros apelamos a la dirigencia comunitaria central, a los directivos de la institución y a los padres de Gesang para que lo que le pasó al Secundario no le pase al Jardín y la Escuela Primaria.
Nuestros abuelos inmigrantes - sin recursos económicos pero apostando al futuro - fundaron escuelas y sinagogas. Hoy directivos de esas mismas escuelas las destruyen, enfrentan a sus integrantes y generan dolor a los alumnos a sus familias. Se oyó decir de algún dirigente: "nuestros abuelos crearon escuelas y nosotros no podemos ni pagar la luz". Una vergüenza.
No se equivoque, mire lo que pasó con todas la escuelas judías que cerraron. Hoy nos toca a nosotros. Mañana, no lo dude, le puede a tocar a usted.
Padres del Instituto Secundario Natan Gesang
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