Luego de estar en el ojo de la tormenta en los últimos días por participar en un acto donde se reivindicó a la organización terrorista Hezbollah, que lo obligó a disculparse ante la DAIA, el ex piquetero y funcionario nacional Emilio Pérsico fue recibido ayer por el papa Francisco en el Vaticano. Al encuentro entre Jorge Bergoglio y el subsecretario de Agricultura Familiar también se sumó el titular de la Confederación de los Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), Juan Grabois, y -según consignó la agencia Télam- giró en torno a un rechazo del "capitalismo salvaje" y la necesidad de un "desarrollo integral del ser humano". Según informó la CTEP en un comunicado, "durante más de dos horas se abordaron temas vinculados a las problemáticas sociales que afectan al mundo, en particular a la situación de los cientos de millones de excluídos que genera el sistema capitalista". El papa "fue categórico al reivindicar la necesidad de profundizar la unidad de nuestra América poniendo el eje en la lucha por la justicia social y la participación popular en los procesos de cambio", dijo la confederación. También hablaron sobre la "relación entre la iglesia y los movimientos sociales". Pérsico fue denunciado el viernes último por concurrir a un acto en una mezquita donde se abogó por la destrucción del Estado de Israel y se reivindicó a la agrupación terrorista Hezbollah. Para desligarse de la controversia, el propio Pérsico fue a la DAIA para asegurar que no compartía los insultos contra Israel. "Fui a una actividad por la paz en Palestina y me vi involucrado en discursos que no comparto, pero ya era tarde", dijo el ex piquetero el jueves pasado tras ser recibido por el presidente de la entidad, Julio Schlosser, y el vicepresidente, Waldo Wolff.
|
|
|
|
|
|