Durante más de 100 años la jerarquía de la iglesia católica dudo acerca de lo que hacer con la monja Ana Catherine Hemrich. A ojos de muchos fue la monja alemana, que murió en el siglo XIX, una santa, mística, poseedora de cualidades por encima de lo natural. Otros, se cuidan de emitir opinión sobre ella.
Es dudable si la discusión sobre Hemrich hubiese tomado estado público a no ser porque es la monja en que se inspiró Mel Gibson para rodar su película La Pasión. Las escenas terribles sobre la crucifixión y la acusación antijudía que emana de la película esta tomada de sus libros y visiones. Su obra se transformó en el centro de inspiración de los cristianos fundamentalistas en especial porque Hemrich describe a los judíos como malvados, sádicos,asesinos de Jesús. Gibson mismo reconoció haber sido educado en ese espíritu.
"Se trata de fantasías antisemitas",dice el Dr. Itzjak Minervi, investigador israelí del Vaticano. "No hay dudas que fue una monja antisemita. Sus visiones fueron fantasias enfermizas.¿Cómo se las puede catalogar de serias?",dice.
Parece que se puede. El pasado 3-10, ante miles de creyentes, Juan Pablo II comenzó el camino final a la beatificación de Hemrich aún a pesar de la protesta de organizaciones judías.Da la impresión que el éxito de la película de Gibson apresuró el proceso de beatificación.
Hollywood no sólo crea estrellas sino también santos.
Hemrich, nacida en 1774, tuvo una vida dura y desdichada. No tuvo estudios primarios y creció con rústicos campesinos. Ya en el convento sufría de ataques de éxtasis religioso y se generaba laceraciones en su cuerpo para simular las heridas de Jesús. Todo ello alimentó su fama y le generó no pocos seguidores entre los católicos.
Hemrich murió en 1824 y ya en 1892 el Vaticano comenzó un largo proceso de beatificación que parece haber llegado a su fin. Pero,¿por qué ahora?. "En la Iglesia hay hoy una lucha muy intensa sobre el modelo de iglesia a conformarse con la sucesión del actual papa y cada corriente mueve sus fichas para imponerse",dice Minervi. "Hay corrientes que quieren volver a la iglesia del pasado entre ellas la rama fundamentalista que adhieren Gibson padre e hijo. El hecho que la hayan vuelto a elevar con la película para transformar a Hemrich antisemita en santa, e un intento de ello",dice Minervi.
"Hay un significado muy grande en el hecho que el Vaticano adopte las visiones antisemitas de Hemrich e indirectamente en La Pasión de Gibson",dice Anet Peri, investigadora del antisemitismo. No sólo que la iglesia no se retracta de la acusación a los judíos como deicidas sino que quita la responsabilidad de Poncio Pilatos en la crucifixión y vuelca la responsabilidad sobre los judíos tal como Gibson lo hizo en su película. Es un intento del catolicismo para enfrentar la Shoa, olvidando a los judíos como víctimas y devolviendolos al lugar histórico de deicidas, tal como lo establece el cristianismo", finaliza.
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