Puede parecer una simple casualidad. Para muchos no tiene demasiada importancia y para otros tantos es algo que causa una sonrisa o una expresión de sorpresa. Otra gran cantidad de personas preguntaban si era cierto, ya que una buena parte de los consultados no estaba al tanto que Daniel Filmus fuera parte de la comunidad judía.
Sin embargo, pese a la casualidad y lo raro de la situación, que dos de los principales candidatos a jefe de Gobierno porteño, Jorge Telerman y Daniel Filmus, pertenezcan a la colectividad es una forma de resaltar la inserción de la judeidad en la política argentina y la gran apertura que viene sucediendo desde hace varios años.
“Ha pasado un poco desapercibido que en los últimos años, se ha producido en distintas elecciones, de distintos lugares, la elección de judíos. Como José Alperovich en Tucumán, también pasó en Rosario y Mar del Plata, como lugares más significativos. Son casos muy notorios en varias de las ciudades más importantes del país, como también pasa en Capital Federal con Jorge Telerman”, opinó en abogado constitucionalista Daniel Sabsay.
El próximo 3 de junio se realizará la elección en la cual puede suceder un hecho histórico, tanto para la Ciudad de Buenos Aires como para la colectividad: podría surgir el primer jefe de Gobierno porteño judío, elegido en elecciones.
Jorge Telerman ocupó su cargo luego de la salida de Aníbal Ibarra, quien fuera destituido por la legislatura tras el incendio en Cromañon el 30 de diciembre de 2004, cuando la banda Callejeros comenzaba un recital en el cual fallecieron 194 personas.
También, es importante destacar que la fórmula kirchernista para la próxima elección estará formada por el actual ministro de educación, Daniel Filmus, y como Vice Jefe de Gobierno irá otro político perteneciente a la comunidad judía: Carlos Heller, lo que destaca aún más la participación de la colectividad en la futura votación.
Tanto Telerman como Filmus aparecen en dos partidos. El actual jefe de Gobierno está en “Frente Más Buenos Aires” (en el cual la primera candidata a legisladora es Gabriela Cerruti) y en la “Alianza Coalición Cívica” (donde lo es Diana Maffia). Mientras que el Ministro de Educación participará en “Alianza Frente para la Victoria” (con Ginés González García para el puesto de legislador) y en “Dialogo por Buenos Aires” (donde figura Aníbal Ibarra como candidato).
El periodista Ricardo “Pepe” Eliaschev da su opinión sobre la contienda electoral y afirma que es algo muy azaroso que ambos pertenezcan a la colectividad, aunque destacó que “creo que es algo altamente saludable y lo que tiene de positivo el fenómeno es que ni Jorge Telerman ni Daniel Filmus hacen una renuncia de su identidad judía. Por el contrario, hay una exhibición más o menos abierta, más o menos implícita y esto, yo creo, es bueno para los judíos argentinos”.
Esto se demuestra claramente, ya que la hija de Filmus va a una conocida escuela de la colectividad, mientras que Telerman viajó hace poco tiempo a Israel donde mantuvo encuentros con diversas autoridades para conocer cuestiones relacionadas con los sistemas de emergencia, defensa civil y evacuaciones, y se reunió con el vice premier Shimon Peres
Por su parte, un grupo de jóvenes judíos encuestados por Comunidades, opinó en su mayoría, que el fenómeno de los candidatos se da por una simple casualidad, aunque varios destacaron como algo importante ver dos personas de la colectividad judía peleando por un puesto tan significativo y que “puede marcar una apertura política trascendental”.
Nuevamente Sabsay habló sobre la próxima elección y aseguró que “me parece que hay una apertura política, porque esta situación tan curiosa, de hablar de dos de los candidatos más importantes para la Jefatura Porteña con muchas posibilidad, y que son judíos, ostensiblemente judíos. No es que tienen un origen, ellos pertenecen a la comunidad, se identifican como tales, y además tienen una actividad del judío practicante. Yo quiero creer que es un avance muy interesante contra la discriminación”.
Otro de los temas que se habló bastante en los últimos tiempos fue el llamado “voto judío”. Primero y principal, para abordar el tema, hay que resaltar que en la Ciudad de Buenos Aires (según los datos de la elección del año 2005) hay 2.580.649 electores quienes forman el 100% de los votantes. Mientras que la comunidad judía es de 150 mil personas (incluyendo menores de edad, quienes no participan del sufragio) lo que no daría más de un 4 o 5 por ciento de votantes judíos.
¿Porqué entonces los candidatos salieron a buscar tan desesperadamente ese voto? Por el lado de Telerman, lo comenta Daniel Sabsay: “Él ha hecho una bandera de su gobierno de ecumenismo, es decir, él trae sus bases políticas, ese armado transversal de tener permanentemente consultas con las cabezas de los distintos credos. Esto es algo como novedoso, porque en sus listas tiene gente de los diferentes credos. Entonces se dan los dos ejes: por un lado su clara identificación con su origen judío y su deseo de recibir el apoyo de los judíos, y por el otro lado, una gran característica ecuménica como base de su ostentación político social”.
Por su parte, Ricardo Eliaschev aseguró que “el espectro de voto judío en la Ciudad de Buenos Aires es un invento bastante antisemita, ya que en realidad somos muy pocos y no definimos ninguna elección. Lo que pasa es que desde el kirchernismo hay una idea muy fantasiosa y delirante que los judíos somos poderosos y manejamos el mundo, incluyendo el capitalismo yanqui ”.
Quien también estuvo involucrado en el llamado “voto judío” es el presidente de la DAIA, Aldo Donzis quien, como ya lo aclararó en una nota, aseguró que la entidad no puede apoyar a ningún candidato, ya que “cada miembro de la comunidad judía pueden votar a quien quiera. Las instituciones son prescindentes de participar, ya que no se puede insinuar que los afiliados voten a alguien en particular. Nosotros celebramos que haya pluralidad y la participación judía en actos eleccionarios a nivel nacional. Pero la comunidad judía institucionalizada a través de la DAIA, que es el representante político, por historia propia y por mandato estatutario no puede participar de política partidaria a nivel nacional y por ende no puede apoyar a ningún candidato”.
La aclaración del presidente de la DAIA surgió porque los aspirantes de la comunidad buscaban el apoyo institucional, como Jorge Telerman que en sus cercanías se creó “Judaísmo Porteño”, encabezado por Daniel Berliner, su jefe de prensa, para acaparar el voto judío. “No hay un voto judío, los votos son individuales de cada miembro de la comunidad. La representación política no refiere al apoyo político partidario a ningún candidato”, concluyó Donzis.
Con respecto al posible futuro jefe de Gobierno, Comunidades consultó a jóvenes entre 18 y 26 años pertenecientes a la colectividad si pensaban que, si fueran elegidos Telerman o Filmus, ayudarían con los problemas de discriminación surgidos luego de la última guerra en Medio Oriente y con las investigaciones de los atentados a la Embajada de Israel y a la AMIA. La respuesta generalizada fue contundente: no.
Como más destacado se puede tomar una opinión que resume la idea de todos los encuestados: “No creo que vayan a resolver los problemas de la comunidad, primero y principal sería bastante chocante el hecho de que tener que esperar que un gobernante sea judío para que trabaje sobre esos temas con mas énfasis”, comentó un estudiante de ciencias políticas.
Por su parte, Ricardo Eliaschev también opinó acerca de la posible ayuda a la colectividad: “La verdad que no lo creo, lo único que puede hacer Filmus, como ministro de Kirchner, como caso hipotético que gane, es tener mejor llegada a la Casa Rosada. Con respecto a la problemática específica nuestra que es la impunidad de los atentados a la Embajada de Israel y a la AMIA no creo que su condición de jefe de Gobierno modifique nada”.
Finalmente, tanto los jóvenes encuestados como los profesionales consultados dan su veredicto acerca de lo que puede suceder el próximo 3 de junio en las urnas.
El 78% de los estudiantes ven mejor posicionado a Jorge Telerman para ganar la próxima elección, aunque no descartan que el apoyo de Kirchner pueda ser fundamental para Filmus.
Mientras que, el abogado constitucionalista Daniel Sabsay aseguró que “Yo creo que si Filmus demuestra realmente que tiene capacidad de independencia, gestión y criterio propio, podría crecer. El problema que el tiene es la enorme adhesión, es prácticamente como un especie de aditamento del Gobierno y del presidente. A medida que no se pueda despegar de eso, le va a ser muy difícil crecer”.
Por su parte, Ricardo Eliaschev comentó que a la fecha le resulta bastante difícil ver otros finalistas que no sean Telerman y Macri. Aunque aclaque que “de aquí al 3 de junio pueden pasar cosas, porque este es un Gobierno que toma cada elección como una guerra mundial y que es capaz de hacer todo lo que sea necesario. Así que no descarto, que por ese esfuerzo de no perder control de ningún territorio, el kirchnerismo salga en Capital Federal con algún as bajo la manga, pero tal como están las cosas, veo muy difícil imaginar una segunda vuelta que no esté centrada en Mauricio Macri y Jorge Telerman”.
El próximo 3 de junio los habitantes de la Ciudad de Buenos Aires definirán quien será su nuevo jefe de Gobierno. En caso que la elección no se defina ese día, la segunda vuelta se realizará el 24 del mismo mes. De todas maneras, gane quien gane, cabe destacar que no sólo para la comunidad judía porteña y argentina es muy importante tener dos candidatos con grandes chances en esta elección, sino que demuestra que en nuestra sociedad existe una pluralidad muy importante: cualquiera puede ganar, no importa su color, raza o religión.
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