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Durante el desayuno realizado en la residencia del presidente israelí el Dia de la Independencia y al que asistieron los más importantes delegados de la sociedad civil y militar de Israel, se sirvió comida no-casher.
En un evento en el cual estuvieron presentes el Primer Ministro Netanyahu, el Presidente Shimon Peres, ministros de gobierno, de la plana mayor del Ejército y de unos 200 oficiales, la comida de la residencia –que normalmente cuenta con supervisión rabínica- fue cambiada por algo totalmente diferente.
De acuerdo con una investigación realizada por Kashrut Fraud Unit del Gran Rabinato, dirigida por el Rabino Rafi Yojai, empleados de la firma independiente Pri Haaretz descubrieron al llegar por la mañana que la carne que habían preparado para el desayuno se había echado a perder. Los encargados del catering inmediatamente mandaron a comprar carne de reemplazo en el poblado árabe de Abu Gosh, cerca de Jerusalem. Entonces la cocinaron en ollas que pertenecían a otros servicios de catering independientes y la sirvieron a los distinguidos invitados sin contarles lo sucedido.
Rav Yojai y su equipo de investigadores pudieron conseguir un video de la compra de carne taref en Abu Gosh que fue usada para el desayuno. Ellos encontraron imágenes muy claras e incriminatorias de un cocinero de la empresa haciendo la compra y llevándola a la cocina de la residencia. Además él les contó a los comerciantes de Abu Gosh que la carne que había preparado se había echado a perder y que tenía que cocinar en ese mismo momento antes de que llegaran los dignatarios.
Como resultado de las investigaciones, el certificado de cashrut de Pri Haaretz fue cancelado y se encargó a los dueños de las otras cacerolas en las cuales se había cocinado la carne no-casher, que volvieran a casherizarlas.
El consejero legal del Presidente notificó a Shimon Peres del incidente, y luego de expresar su enojo Peres ordenó realizar una demanda por fraude.
Una cantidad de ministros religiosos y de importantes oficiales de las fuerzas armadas que estaban en el desayuno dijeron que ellos investigarían si los servicios de seguridad estaban comprometidos con lo sucedido, dado que según ellos el incidente no sólo constituye un fraude a la cashrut sino también una seria omisión en la seguridad.
Ellos señalaron que si alguien puede entrar de contrabando semejante cantidad de carne no casher en la residencia del Presidente, también podrían, jas be’shalom, ingresar de contrabando la misma cantidad de armas y de explosivos.
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