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Boca Raton, Florida – Obama dijo ante una multitud congregada en la sinagoga local que no presten oído a los falsos rumores que circulan a través de Internet diciendo que él es musulmán –él es cristiano- y otros ataques que cuestionan lealtad hacia Israel y las causas judías.
“Creo que parte de la tradición del pueblo judío es juzgarme por lo que digo y por lo que he hecho”, dijo. “No me juzguen por tener un nombre gracioso, no me juzguen por ser un afro-americano”, dijo en respuesta a los fuertes y escépticos cuestionamientos de la multitud.
Un hombre le dijo a Obama que su amigo le había dicho que iba a votar por él sólo si cambiaba su nombre por el de Barry. Cuando Obama era niño su familia solía llamarlo Barry, pero más tarde él comenzó a usar su nombre formalmente recibido.
Obama respondió que su padre era procedente de Kenya. “Barack significa lo mismo que Baruj (en hebreo), quiere decir ‘uno que es bendecido’”, agregó.
En otro momento, Obama fue impactado por la pregunta respecto a su asociación con alguna gente que que está a favor de Israel, y se le pidió que mencione a sus amigos judíos que no provengan de la política. Obama sólo nombró a unos pocos pero defendió su derecho a estar relacionado con gente con la que no está de acuerdo. “Debemos ser cuidadosos en no acusar a alguien por sus vinculaciones”, insistió.
Algunos diálogos con miembros de la audiencia realizados con posterioridad a sus declaraciones, sugieren que Obama sigue enfrentando una dura batalla dentro de la comunidad judía.
“El es una persona muy preparada”, dijo Simon Mizraji, de Boca Raton. “Pero yo voy a votar a Mac Cain”.
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