Los reiterados desaires de Obama a Netaniahu y los desencuentros entre los
dos lideres son repetitivos y visibles. Una de las causas radica en el
hecho que el presidente de EE.UU. esta convencido de que el irresuelto
conflicto palestino-israeli es la base de todos los problemas regionales y
acrecienta la violencia en la zona. Es una percepcion controvertida y
falsa.
En el corriente 2015, el presidente de Egipto, Al Sisi, no ha condicionado
su colaboracion con Israel en materia de seguridad y no solo eso sino que
ha estrechado el cerco sobre el Hamas .La actual paralisis en el proceso
de paz entre palestinos e israelies no lo condiciona. El ve en el
terrorismo del Hamas y de la Hermandad Musulmana como algo que asocia aun
mas a Israel con Egipto permitiendo una mayor estabilidad.
Tampoco Jordania, los Emiratos del Golfo, Arabia Saudita ( incluso Qatar
que ayudo al Hamas) no consideran a l os palestinos en el orden de sus
prioridades y no le estan otorgando ayuda significativa.. Mas bien la
misma fue recortada por los intentos de radicalizacion regional.
En el 2014 estos y otros paises arabes apoyaron indirectamente a Israel
dandole luz verde al operativo contra el Hamas de agosto de 2014 dado que
vieron peligros desestabilizadores sobre Egipto y Jordania.
En 1977 el presidente de Egipto, Anwar Sadat, apoyo la iniciativa de paz
del premier israeli, Menajem Beguin, pese a la oposicion del presidente
democrata, Jimmy Carter. El entonces lider norteamericano veia en las
negociaciones directas entre Israel y Egipto un daño a su intencion de
conformar una conferencia internacional de paz que de por si inducia a
situar al conflicto palestino-israeli como raiz de todo el conflicto.
En contraposicion a la tesis de Obama, las relaciones arabes- israelies
no giran alrededor del eje palestino. Veamos algunos hechos mas.
En 1948, guerra de la Independencia de Israel,los paises arabes entraron
en guerra no en apoyo del estado palestino sino por intereses propios.
Iraq aspiraba a dominar el oleoducto Kirkuk- Haifa; Jordania deseaba
expandirse mas hacia el Mediterraneo, Egipto chocaba sus intereses con
Jordania y Siria buscaba consolidar su sueño sobre la gran Siria: dominar
Israel y Libano.
Para el profesor Efraim Kersch, orientalista del King College de Londres,
la invasion pan-arabe de 1948 fue un ejemplo de una lucha territorial y no
por los derechos de los palestinos.
El secretario general de la Liga Arabe en 1948, Abdel Rajman Azam, confeso
que el objetivo jordano era conquistar Jerusalem y un sector central de
territorio asignado a los palestinos por la ONU mientras que Egipto
deseaba el Neguev y Siria el dominio de las fuentes de agua en la Galilea
y el Kineret.
De hecho Jordania " libero " territorios que no entrego a los palestinos.
Egipto controlo Gaza hasta 1967 y tampoco se la entrego a los palestinos.
Lo maximo que hicieron los arabes fue orientar el nacionalismo palestino
hacia Israel, " olvidando " que ellos tenian en su poder parte del
territorio que los palestinos reclamaban.
En 1959 la Liga Arabe desarticulo al gobierno provisional palestino creado
en 1949.
En 1956 el conflicto con Egipto tiene muy poco que ver con los intereses
palestinos y mucho mas con el nacionalismo egipcio.
En 1967 estalla la guerra de los Seis Dias por las ambiciones panarabes de
Nasser, el cierre del estrecho de Tiran y la violacion del desmilitarizado
Sinai.
En 1973 estallo la guerra de Iom Kipur sin relacion alguna con la causa
palestina.
En 1982, en Libano, estallo en este pais la primera guerra palestino-
israeli en suelo vecino sin transformarse en un conflicto arabe- israeli.
La primera Intifada ( revuelta palestina) de 1987 y la segunda(
2001-2004) y los operativos antiterroristas en Gaza de 2008, 2012 y 2014
no arrastraron a los arabes a un conflicto que fue solo con el terrorismo
palestino.
La concepcion erronea de Obama por la cuestion palestina no solo no solo
no es el centro de la cuestion sino que se desentiende de la complejidad
de la guerra interreligiosa islamica desde el 2011, daña los intereses y
las relaciones entre dos socios vitales, fortalece y legitima el terror y
empecina a los palestinos a encaminarse por el camino erroneo de las
presiones politicas unilaterales en los foros internacionales.
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