(ajn) El 18 de julio de 1994, el atentado a la AMIA cobró la vida de ochenta y cinco personas, dejó doscientos heridos y produjo serios daños a las colecciones de la biblioteca y el archivo de IWO que funcionaba en el tercer y cuarto piso del edificio de la entidad mutual. Allí se atesoraban miles de libros, documentos, colecciones de arte, de objetos de la vida cotidiana y de culto conformado uno de los más importantes acervos históricos de América Latina.
Ochocientos voluntarios, en su mayoría en edad escolar, participaron del rescate de la biblioteca y el archivo y gracias a su labor fueron rescatados cerca del 60% de las colecciones. A partir de ese momento, se reconfiguró la relación tradicional del usuario del archivo, orientándose la Fundación a acercar adolescentes y jóvenes al rol de los archivos en la construcción de su identidad y memoria.
El programa para jóvenes cuenta con los proyectos Jóvenes investigadores, la historia en mi escuela, el rescate de IWO y Archivistas trabajando que promueven la toma de responsabilidad del sujeto por su propio acervo cultural, el trabajo voluntario, la valoración de las diferencias culturales y lingüísticas y la lucha contra la discriminación.
Hace 4 años uno de los proyectos, el del rescate de IWO se plasmó en Pequeños Autores, Grandes Ideas dirigido a alumnos de escuelas primarias con la proyección del documental “Los jóvenes que preservaron la memoria” de Rodolfo Compte que relata la historia del rescate de las Colecciones de la Fundación IWO con testimonios de los jóvenes voluntarios.
Pequeños autores, grandes ideas se propone informar a los adolescentes sobre los hechos acontecidos el 18 de julio de 1994; cultivar el valor del cuidado de los libros y del patrimonio histórico, comprendiendo que son elementos fundamentales en la construcción de la identidad y la memoria; promover el valor de la solidaridad y promover un espacio de expresión y de comunicación a través de la creatividad y la participación.
Luego de exhibirse el documental los alumnos son invitados a volcar sus ideas, opiniones y preguntas a través del dibujo y la palabra en libros confeccionados artesanalmente. Una vez realizados, los libros se digitalizan en el marco del proyecto de Digitalización de Colecciones y regresan a las escuelas para ser parte de su biblioteca.
De este modo se han creado libros únicos con mensajes y dibujos realizados por adolescentes de 11 y 12 años que valen más que mil palabras para volcar sus sentimientos, reflexiones y preguntas.
Han participado en este proyecto las escuelas Arlene Fern, Beth, Bialik Devoto, Martin Buber, Natan Gesang, Jaim Weitzman, Ioná, Scholem Aleijem, Talpiot y Tel Aviv.
En el mes de julio el proyecto fue presentado en la Biblioteca del Congreso de la Nación y en el mes de octubre la Fundación IWO presentó el proyecto en un auditorio colmado en la Jornada de Bibliotecología Social de BIBGRA en el marco de la Feria del Libro de la Universidad Nacional de Lanús donde bibliotecarios de diversas regiones pudieron interiorizarse acerca del proyecto.
La Fundación IWO quiere agradecer a todas las escuelas que este 2012 nos abrieron sus puertas y a los chicos por abrir y brindar su corazón en cada hoja.
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